La historia de Citroën en nuestro país siempre fue muy rica e importante, con autos emblemáticos, queridos y populares que dejaron sus huellas bien marcadas en los argentinos. Y uno de los clubes de clásicos que año a año promulga este espíritu de camaradería es, sin dudas, el Citroën Club Buenos Aires. Un nuevo evento
La historia de Citroën en nuestro país siempre fue muy rica e importante, con autos emblemáticos, queridos y populares que dejaron sus huellas bien marcadas en los argentinos. Y uno de los clubes de clásicos que año a año promulga este espíritu de camaradería es, sin dudas, el Citroën Club Buenos Aires.
Un nuevo evento organizado por este reconocido grupo de fieles concentró a más de 100 exponentes de diversos modelos de la marca y de distintas épocas para celebrar, sobre todo, el aniversario número 75 del querido 2CV en el mundo. Pero no fue el único festejo en el Club Los Pinares de Capilla del Señor. Las más de 250 personas presentes que llegaron a bordo de este centenar de autos clásicos, se juntaron para celebrar el 23º aniversario del Citroën Club Buenos Aires y los 50 del Citroën Prestige. En esta ocasión se unieron al festejo otros dos clubes amigos de la marca como son: el Club Mehari de Argentina y Citrounidos.
Un auténtico festival para los sentidos, con caravanas, exhibiciones, camping, familias, votaciones y entregas de distinciones especiales para algunos de los modelos presentes. Entre ellos se destacaron decenas de 2CV y 3CV, pero también Traction Avant, Ami 8, Meharis, SM y tantos otros clásicos de la marca.
La reunión contó con el apoyo de Citroën Argentina que se hizo presente para darle el marco institucional que merecía la magnitud del evento, con la exhibición de dos modelos muy importantes: el Nuevo Citroën C3 y el distintivo SUV C5 Aircross, que se robaron las miradas de todos los presentes.
Un día festivo al aire libre y en familia: el mejor homenaje para una marca que caló hondo en el corazón de distintas generaciones. “La teoría no sirve para nada. Lo importante es el ejemplo”, decía André Citroën. “Si las personas no pueden llegar a Citroën, entonces será Citroën quien se acerque a las personas”. Y así nació el 2CV. Un visionario que supo anticiparse a su tiempo con ideas e innovaciones que marcaron la historia de la industria del automóvil.
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