DISEÑO/ESTILO
A pesar de su estilo agresivo e impactante, el 308 no puede negar el ADN continuista de su antecesor, el 307, modelo que fue líder y referente indiscutido de su segmento en Argentina.

Con trazos modernos y atractivos, en esta versión Sport las diferencias son muy sutiles. Lo más llamativo son las llantas que mantienen la medida (17 pulgadas) y el diseño de las que utiliza la versión Féline, pero en este caso están pintadas en un tono gris oscuro.

Sobre el portón se agrega la sigla THP que anuncia que se trata del motor más potente y moderno, así denominado. Mantiene además el techo panorámico, atractivo a la vista pero generador de calor en el habitáculo durante los días de sol.

INTERIOR/CONFORT
La decoración interior es uno de los puntos más atractivos de la gama 308 y en este Sport se suman algunos elementos distintivos como la pedalera de aluminio y el volante deportivo forrado en cuero –con la sección inferior recta–.

Las regulaciones del asiento del conductor son manuales y a pesar de su condición más deportiva la posición de manejo, todavía nos resulta algo elevada, aún en el punto más bajo. El espacio interior no muestra diferencias, con un razonable lugar en las plazas traseras para una familia tipo.

En general la calidad percibida es muy buena, y tras varios centenares de kilómetros por caminos irregulares y empedrados no se percibieron ruidos estructurales, lo que refleja cierto esmero en el armado.

Si lo comparamos con su competidor más directo (contando la caja automática), que es el Chevrolet Cruze LTZ hatchback, este Peugeot queda muy favorecido en términos de equipo de serie: tiene navegador satelital, conexión bluetooth, climatizador de doble vía, techo panorámico, plegado eléctrico de espejos, etc.

En esta versión Sport, además de los detalles distintivos y el motor más potente, la rueda de auxilio es similar a las restantes por medida y tipo de llanta. Pero, si tomamos como referencia al 408 Sport, carece de algunos elementos como la regulación eléctrica del asiento del conductor, el sensor de estacionamiento delantero  y los faros bixenón direccionales. En otras palabras, tiene el mismo equipamiento que el 308 full Féline, lo que significa un buen nivel para un modelo Mercosur.

MOTOR/PRESTACIONES
Desarrollado en conjunto entre el grupo PSA y BMW, este “THP” es uno de los propulsores más reconocidos de los últimos tiempos. Hoy le da vida a modelos como –nombrando sólo los comercializados en Argentina– Peugeot 508, 3008, 5008 y RCZ, Citroën DS3 y DS4, Mini Cooper S, BMW Serie 1, etc.

Con inyección directa, 1,6 litros y turbo de doble entrada, desarrolla 163 CV, y en conjunto con la caja automática de seis marchas (no hay por el momento versión manual), las prestaciones son satisfactorias para quien busca respuesta y rendimiento.

Agil, muy progresivo y sereno, se muestra mucho más enérgico y menos “vueltero” que el 2.0 atmosférico otros 308. Pero su desempeño podría llegar a ser incluso mejor si la gestión de la caja automática fuera más rápida. Por momentos, el paso de los cambios refleja ciertas demoras, sobre todo de segunda a tercera, aunque en condiciones de manejo exigentes.

Lo que más impresiona de este propulsor, y de ahí su gran elasticidad, es el elevado torque (24,5 kgm), disponible a partir de las 1.400 rpm, un régimen bajísimo. Garantiza así buenas reacciones y compensa en parte los patinamientos de la transmisión.

Con este impulsor, el 308 es el auto más veloz de producción nacional. Alcanza una velocidad máxima de 208 km/h (en sexta a 4.600 rpm) y acelera de 0 a 100 en 9,5 segundos.

Hijo del downsizing (la corriente de reducción de talla de los motores), el consumo es uno de sus puntos destacables. Aprovechando también una sexta larga que rebaja el régimen del motor, le bastan 7,4 litros para recorrer 100 km en ruta a 100 km/h, mientras que en ciudad el registro promedio es de 9,4 litros. El tanque de 60 litros garantiza una mejor autonomía que en la versión 2.0.

A modo de comparación, el 308 con el motor 2.0 (143 CV) y caja manual de quinta acelera de 0 a 100 km/h en 10,5 segundos, además de alcanzar una velocidad máxima de 200 km/h. En tanto, el consumo es de 6,7 l/100 km a 100 km/h y de 11,3 l/100 km en ciudad.

COMPORTAMIENTO
Aunque se trata de una versión con intenciones deportivas, no se han alterado los valores de la amortiguación. Mantiene un conjunto más orientado hacia el confort, pero en líneas generales el reglaje es firme y muestra gran solvencia dinámica en todo tipo de curvas, sin vicios ni tendencias desagradables.

En largas rectas rueda aplomado y es en su segmento uno de los menos sensibles a los vientos laterales. A partir de esta versión, los ingenieros de El Palomar trabajaron especialmente en algunos componentes de la suspensión, como la dureza de los bujes y otros elementos para atenuar algunos rebotes ásperos en el eje trasero.

Ahora resuelve más suavemente lomos de burro, pozos, cunetas. Comparado con la versión 2.0 que AW evaluó a principios del año se advierten las diferencias en el comportamiento –para mejor–, sobre todo en los empedrados.

SEGURIDADCon neumáticos Michelin y un ABS que sólo se activó sólo cuando fue necesario, este Sport recibió la mejor nota en las pruebas de frenado, ya que utilizó menos de 40 metros para detenerse desde 100 km/h, más precisamente 38. Al igual que el Féline, dispone de seis airbags, incluyendo laterales delanteros y windowbags para las cuatro ventanillas. También ofrece faros antiniebla delanteros y traseros.

Como se dijo, en ruta la tenida general es muy buena y transmite gran seguridad al conductor y sus acompañantes. Además, está equipado con control de tracción y estabilidad (ESP), que evitan pérdidas de trayectoria. Como sucede en los modelos del grupo PSA, se pueden desconectar, pero a partir de los 50 km/h se activan automáticamente.

Entre los aspectos a mejorar, se pueden considerar la ausencia xenón para los faros (incluido en el 408 Sport), y ganchos Isofix para sillas infantiles.

PRECIO/COMPETENCIA
El 308 1.6 THP Sport se ofrece a 166.000 pesos (mediados de octubre de 2012), un valor razonable si consideramos que el Chevorolet Cruze LTZ automático, con menos potencia, equipamiento y prestaciones cuesta $ 159.160. Respecto del 2.0 Féline Tiptronic (versión a la que reemplaza), este Sport es 8.500 pesos más caro.

Si se abre el abanico de rivales, un Citroen DS4, que utiliza la misma plataforma y mecánica, es mucho más costoso ($ 211.000) ya que llega importado de Francia y tiene algunos accesorios plus de equipamiento.

De esta manera, el 308 Sport se posiciona como el producto más conveniente de su categoría. La garantía se mantiene sin cambios: tres años o 100.000 kilómetros, algo importante que podría hablar de la confiabilidad del auto. Además, Peugeot es una de las marcas que más trabaja para mejorar su servicio de posventa, y eso no es poco.