Al lanzamiento de la versión Longitude, se suman ahora las Sport y Trailwahk. No hay cambios en las dos motorizaciones y las tres cajas.
A fines de enero, Jeep comenzó la comercialización del Renegade 2019 en su versión Longitude. Ahora suma las otras dos opciones restantes, con las mismas novedades en estética exterior e interior.
Estas pequeñas modificaciones se ven en el frente, con nuevas ópticas, paragolpes y parrilla y une nueva manija de portón en el sector posterior.
Por dentro, lo más destacable además de nuevos comandos para el climatizador, es la pantalla táctil de 7″ en el Sport y de 8,4″ en los Limited y Trailhawk, ambas con conectividad Apple Car y Android Auto.
A nivel mecánico no hay novedades. Las Sport y Longitude seguirán con el 1.8 de 130 CV y la caja automática de seis marchas. En tanto, el Trailwawk (ver prueba) mantiene el 2.0 turbodiesel de 170 CV, la caja automática de nueve relaciones y la tracción integral.
Hay que aclarar que el Sport manual continuará a la venta sin las novedades por un tiempo limitado y luego adoptará el mencionado restyling. Estas unidades remanentes se consiguen a 1.018.750 pesos.
Tanto el MT como el Sport AT (1.098.550 pesos) vienen con doble airbag, ESP, isofix, llantas de 17″, faros antiniebla delanteros, luces diurnas de led, freno eléctrico, climatizador bizona, pantalla táctil de 7″ (de 5″ en el MT sin renovar) con cámara, control crucero y sensor de estacionamiento.
La Longitude (a 1.245.950 pesos) suma airbags laterales, de cortina y de rodilla, llantas de 18″, faros full led, tapizado de cuero y pantalla táctil de 8,4, mientras que el Trailhawk (1.622.850 pesos) agrega pintura bicolor, techo panorámico y acceso y arranque sin llave.
El Renegade es rival de los Chevrolet Tracker, Citroën C4 Cactus, Fiat 500, Ford EcoSport, Honda HR-V, Hyundai Creta, Nissan Kicks, Peugeot 2008, Renault Captur y el futuro Volkswagen T-Cross.
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