La nueva generación, producida en Tailandia, está arribando a varios mercados latinos, pero no formará parte de la gama en la Argentina.
Chevrolet acaba de lanzar en Perú la nueva generación de la Captiva, un modelo que es clon de los Baojun 530 y MG Hector. Próximamente será comercializado tanto allí como en Bolivia, Chile, Colombia, Ecuador, Paraguay y Uruguay.
Pero el desembarco no contempla los mercados más importantes, como Brasil y la Argentina, donde los productos como este, provenientes de Tailandia, cargan arancel.
La nueva Captiva tiene opciones de cinco y siete asientos (algo que GM ataca en la Argentina con el TrailBlazer pero no con la Equinox) y cuento con un motor 1.5 turbo de 147 CV, asociado a una caja manual de seis marchas o una CVT.
Mide 4,66 metros de largo, 1,84 de ancho, 1,76 de alto y 2,75 entre ejes. Una Equinox es apenas un cm más corta, igual de ancha, 10 cm más baja y solo dos cm más corta entre ejes.
De allí que su llegada, pese a contar con tres filas de asientos, no es del todo fácil para posicionarse en el mercado argentino.
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