Pese al contexto actual, General Motors confirmó a fines del año pasado que la inversión de 500 millones de dólares para producir un nuevo modelo a fines de 2020 en Rosario, sigue en pie.

La empresa nunca divulgó qué tipo de modelo piensa producir en compañía del Cruze, pero todo apunta a que sea uno de los nuevos SUV que Chevrolet incorporará a su gama.

Uno de ellos podría ser la nueva generación de la Spin, que seguramente se reconvierta a un Sport Utility tal cual viene sucediendo con la mayoría de los monovolumenes y familiares. Sin embargo, ese modelo podría hacerse en Brasil, al igual que la nueva generación de la Tracker (ver nota).

La otra posibilidad es la de un SUV que se ubique a medio camino entre el nuevo Tracker y el actual Equinox, para competir en forma directa con el Jeep Compass regional.

Así como en China se revelaron las nuevas generaciones de los Prisma y Tracker, ahora fue el turno del Buick Encore (la marca americana es la de mayor éxito dentro de GM en Asia).

El modelo mide 4,46 metros de largo (el nuevo Tracker mide 4,27 y el Equinox 4,68), con lo cual podría encajar perfectamente en una futura gama de SUV de la marca para la región.

Siendo así, el nuevo modelo de Chevrolet debería adoptar una estética frontal que lo distinga de este Buick, más emparentado con la línea que supieron tener los Opel en la época en que la americana era su dueña.