Porsche revelará hoy la octava generación del 911, el modelo que reemplazó en 1964 al 356 y se convirtió no sólo en el ícono de la marca sino también en uno de los deportivos más importantes de la historia.

Nació en septiembre de 1963 como 901, pero una demanda entablada por Peugeot por el “0” central, obligó a la alemana a llamarlo 911 cuando apareció en el mercado en 1964. Tenía un motor refrigerado por aire de 130 CV y además del “coupé” también estaba disponible en Targa, un cabrio con refuerzos antivuelco.

En 1973 el 911 seguía siendo el mismo, pero las normativas norteamericanas lo obligaron a llevar paragolpes más voluminosos, con el que se denominó Serie II. Aparecieron las versiones Turbo, Cabrio y Speedster, más elementos de seguridad y la potencia máxima llegó a 300 CV.

El primer rediseño llegó en 1988 con el código 964. Apareció la tracción integral heredada del 959 y se mantenían las carrocerías Coupé, Cabrio y Targa, pero luego resurgió el Speedster. Las potencias según las distintas versiones iban de los 250 a los 360 CV.

El 993 llegó en 1993 y si bien mantenía la plataforma, sufría un profundo rediseño de todos sus paneles. El Turbo llevaba un motor biturbo y el Targa apelaba a un techo corredizo en vez de desmontable. La potencia inicial se incrementaba a 270 CV, mientras que el GT2 alcanzaba los 450 caballos.

1997 fue un año bisagra para el 911. El 996 dejaba atrás 34 años de historia con la misma plataforma y el motor refrigerado por aire. El 911 tomó elementos del chasis y del diseño del flamante Boxster (ya sin los faros circulares), algo que no cayó del todo bien entre los porschistas más fanáticos.

Para la nueva generación de 2004, llamada 997, Porsche unió el estilo clásico del modelo y toda la tecnología disponible. Llegó a ofrecer 24 versiones e incorporó la inyección directa a sus motores y el cambio PDK de doble embrague y la potencia del GT2 RS alcanzó los 620 CV.

En 2011 llegó la última generación, la 991, que incorporó motores turbo en toda la gama, para ofrecer más potencia sin elevar la cilindrada. Esta camada es la más vendida de la historia y con ella el modelo superó el millón de unidades. Las potencias van de los 350 a los 700 CV.