Entre la baja en las ventas de nuestro mercado y la suba de Brasil a niveles récord en los últimos cuatro años, la industria argentina de automóviles está en un auténtico subibaja.

El informe habitual de la Asociación de Fábricas de Automotores (ADEFA) da cuenta que, en octubre, las terminales produjeron 38.659 vehículos (automóviles y utilitarios), lo cual muestra una mejora de 3,7 por ciento en relación a las 37.267 unidades que se produjeron en septiembre, pero una baja de 11,8 por ciento respecto de octubre de 2017 cuando se produjeron 43.854 vehículos.

Entre enero y octubre, el sector produjo 409.366 unidades, una leve mejora de 3,7 por ciento respecto de las 394.900 unidades que se produjeron en el mismo período del año anterior.

Las exportaciones, por su parte, alcanzaron los 22.028 vehículos entre autos y utilitarios livianos en octubre, una baja de 5,6 por ciento en relación a lo exportado en septiembre, pero un aumento de 4,0 por ciento respecto a las 21.176 unidades que se exportaron en octubre de 2017.

En el acumulado anual, las terminales exportaron un total de 220.365 unidades, una mejora importante del 27,9 por ciento con respecto al mismo período de 2017.

En las ventas mayoristas, en octubre se comercializaron a la red 37.207 unidades, es decir, una contracción del 12,7 por ciento respecto de las 42.628 vendidas en septiembre y de nada menos que el 50 por ciento ante el mismo mes del año pasado, cuando se entregaron 74.416 unidades a la red de concesionarios.

El acumulado del año se ubicó en 600.303 unidades comercializadas a la red, un 16 por ciento menos respecto de las ventas del mismo período del año anterior.