Lamborghini lanza su segundo modelo híbrido enchufable luego del Revuelto. El Temerario, que se ubica por debajo de este, reemplazará al Huracán, que se vende desde fines de 2013.

El motor deja de lado el V10 atmosférico del Huracán para adoptar un híbrido que une un naftero y tres eléctricos. El primero es un V8 biturbo ubicado en posición central, detrás del habitáculo, con 4.0 litros, 800 CV, 730 Nm y capaz de girar a 10.000 rpm.

Los motores eléctricos, que desarrollan hasta 150 CV cada uno, tienen diferentes usos: uno se ubica junto al V8 y sirve para arrancar el vehículo, asistir al naftero y mover las ruedas posteriores. Los otros mueven las ruedas delanteras solo ante una demanda o cuando se activa el modo puramente eléctrico.

La potencia final es de 920 CV en los modos Sport y Corsa, de 800 en el Strada y de 190 en el Cittá, exclusivamente eléctrico. La batería es de solo 3,8 kWh y puede recargarse por enchufe (en media hora) o gracias al motor térmico o la frenada regenerativa.

La caja es una automática de doble embrague y ocho marchas y va colocada en forma transversal tras el V8, mientras que la tracción es integral.

El Temerario mide 4,71 metros de largo, 2,00 de ancho, 1,20 de alto y 2,66 entre ejes. Los neumáticos tienen medida de 20″ adelante y 21″ atrás. El baúl, delantero, tiene 112 litros. Hay 400 colores disponibles para la carrocería, de aluminio, y llantas pueden ser de fundición, forjadas o de carbono.

El habitáculo ofrece dos plazas con lugar para personas de hasta 2 metros de alto, con casco incluido, y tres pantallas, de 12″ (instrumental), 8″ vertical (multimedia) y 9″ (frente al acompañante).