Tras un importante atraso debido a los múltiples inconvenientes que tuvieron las terminales nacionales en el último año, Fiat lanzó finalmente el Fastback en nuestro mercado.

Las líneas exteriores mezclan la trompa del Abarth Pulse, el lateral del Cronos (comparte el tamaño de sus puertas) y una cola totalmente novedosa, con el estilo que da nombre al modelo.

El Abarth suma spoiler trasero y delantero, escape doble, pasarrueda color carrocería, llantas exclusivas oscurecidas con neumáticos más anchos y el cambio de logos característico de la marca deportiva.

El Fastback mide 4,43 metros de largo (un Cronos mide 4,36) y ofrece 19 cm de despeje, 20° de ángulo de ataque y 21° de salida. De ancho llega a 1,99 metros (con espejos), de alto a 1,55 y entre ejes a 2,53. El baúl es de 600 litros.

Por dentro casi todo es igual al Abarth Pulse. El Fastback repite la plancha, tablero y pantalla, manteniendo el freno de mano eléctrico (con función Auto Hold) y poco más.

Ambas versiones se valen del mismo motor: el 1.3 turbo de 175 CV y 270 Nm, ya visto en Pulse, Renegade, Toro y Compass. Tiene tracción simple y la caja es una automática de seis marchas. El Abarth, como en el Pulse, presenta cambios en la calibración del motor, caja, escape, dirección, frenos y suspensión.

De serie, el Fastback ofrece cuatro airbags, frenado autónomo, mantenimiento de carril, faros full led, luces altas automáticas, e-Locker, carrocería bitono, llantas de aleación de 18″, pantalla táctil de 10″ con cámara, cargador inalámbrico, tablero digital, acceso y arranque sin llave, sensor de estacionamiento, climatizador automático, control crucero, sensor de lluvia, encendido automático de luces y tapizado de cuero.

El Fiat Fastback cuesta 31.500.000 pesos y el Abarth Fastback vale 33.900.000 pesos. El Abarth está disponible en colores blanco, gris, negro y rojo. El Fiat suma otro gris y plata.