A mediados de 2020, por las restricciones que ya empezaban a sufrir los importados, Fiat mudó su estrategia de ventas de autos compactos: concentró casi todas las operaciones en el Cronos, dejando para los Mobi y Argo apenas los planes de ahorro ya suscriptos.

A fines del año pasado, los dos modelos brasileños salieron definitivamente del catálogo nacional (ver más). Argo y Mobi interrumpían seis y siete años de venta en el país, respectivamente.

Así, el segmento A del mercado se quedó sin oferentes, tras la desaparición del Up (fin de vida natural), el Kwid (Renault los discontinuó en 2021 para priorizar la venta de vehículos nacionales) y el Mobi.

Sin embargo, 2024 pinta distinto. La marca francesa ya lanzó la versión eléctrica del Kwid (ver más) y Fiat podría volver a vender su modelo más chico, con la habitual motorización 1.0 naftera.

En marzo, el modelo logró un puñado de patentamientos, pero estas correspondieron a unidades que habían quedado en la aduana (algo extensible a muchos modelos de varias marcas).

Si bien no hay nada oficial, la marca está estudiando el regreso del Mobi (en su versión Like), que como siempre se ubicará por debajo del Cronos, permitiendo un precio de entrada, y de plan de ahorro, más accesible.

Lo del Argo es más complicado, porque si bien las restricciones con Brasil son cosa del pasado (algo que se puede comprobar en los patentamientos de Strada, Fiorino y Toro), la nueva dirección de Stellantis no vería con buenos ojos reincorporar a un competidor al Peugeot 208.