Hace solo seis años, Honda tenía el 2 por ciento del mercado argentino. Eran otros tiempos, sin restricciones a las importaciones y con la planta de Campana produciendo la HR-V.

Este año, con una oferta muy reducida de modelos importados, la japonesa va a cerrar apenas con el 0,3 por ciento de la torta, la misma penetración que realizó en 2022.

Sin embargo, con los últimos lanzamientos de ZR-V (ver más) y HR-V (ver más), prevé crecer al 1 por ciento en 2024 y al 1,5 en 2025, aun con todos modelos importados desde distintas regiones (Brasil, México, Estados Unidos y pronto Tailandia).

“Estamos tratando de recuperar de a poco los volúmenes históricos que teníamos”, señala Víctor Pruvost, Gerente Comercial de Honda Argentina, a quien entrevistamos en el lanzamiento de la nueva HR-V.

Para recuperar esos números aun sin exportación de productos locales, Pruvost confirmó que en la marca están “trabajando una política de utilización de dólares propios para asegurar los volúmenes de los lanzamientos, si es que no salen las SIRAS en pesos”.

El crecimiento, como vimos, será fuerte: “estamos previendo un volumen de 2.500 a 2.800 unidades anuales con HR-V. Con ZR-V es un poco menor, en orden de las 1.500 unidades anuales”, anticipa el directivo.

A eso, hay que sumarle la nueva CR-V, que llegará en enero, el Civic híbrido, que lo hará más tarde, y otro modelo híbrido que la marca aún no revela. Además, el Gerente adelantó que “estamos trabajando en un modelo bien de entrada de gama, pero no podemos dar una estimación de tiempos”.

El HR-V fue lanzado con un precio de 32 a 35 mil dólares. “Hoy estamos vendiendo a dólar billete“, confirmó Pruvost, pese a que hace solo un mes, el precio de la ZR-V fue cotizado a dólar oficial. “Cambiamos porque el mercado nos mostró otra cosa”, se sinceró el directivo.