Probamos la nueva generación del sedán de Volkswagen, que llega con el motor turbo 1.4 y nueva caja automática. En qué mejoró y qué perdió.
Texto y fotos: Matías Antico
El Vento es en realidad el Jetta, que a su vez vendría a ser “el sedán del Golf”. Así nació en 1979 para ganarse el público “entry level” del mercado norteamericano. Y por cierto no era muy agraciado… se trataba básicamente de un Golf con un cajón trasero.
La estilización llegó recién con la cuarta generación (1999), que en Europa y Argentina se denominó Bora (hoy “el Borita”). Luego, en 2006 llegó al país el Mk5 y adoptó el nombre Vento, que ya se había usado en Europa. Moderno, seguro y con calidad casi Audi, no tardó en posicionarse como el referente del segmento e incluso complicó a algunos más grandes y caros, como al propio Passat (especialmente al norteamericano, de menos calidad que el alemán). Venir de México y no pagar aranceles siempre fue una ventaja adicional en el mercado argentino.
Hoy llega la séptima generación, que a diferencia de la sexta (que llegó en 2011), tiene la misma plataforma que el Golf, aunque en términos estéticos en nada se le parece. Su estilo frontal tiene ADN Arteon (el sucesor del Passat CC), mientras el remate de cola, bastante largo y pesado, es propio. Bueno, compartido con el Virtus. No sabemos quién copió a quién pero hay un sospechoso…
Como sus antecesores, este nuevo Vento llega de México, donde se produce principalmente para abastecer a Estados Unidos, donde es un auto popular, de los más accesibles, con un valor inicial de 18.500 dólares. Y un dato clave: ya no se vende en Europa, donde su posicionamiento sería diferente. Por lo tanto está americanizado, lo que se advierte en algunos materiales “sencillos”, más acordes a un auto de alquiler que a uno de alta gama.
Las economías también están entre lo que no se ve: la caja DSG de siete marchas fue reemplazada por una Tiptronic convencional de seis, y la deliciosa suspensión trasera independiente ya es un recuerdo; ahora tiene un eje torsional semi-independiente… más sencillo y barato.
Lo bueno es que el motor sigue siendo el recontra eficiente 1.4 TSI de 150 caballos, el único disponible hasta que el año que viene se sume el GLi 2.0 TSI con unos 230 burritos. Lo malo es que ofrece sólo dos versiones y no hay opción de caja manual como en otros mercados. Del diésel no voy a decir nada… demasiado lío se armó con los TDi…
Este nuevo Vento llega en un momento complicado del mercado y de la economía. Y encima debe pelear en un segmento con jugadores fuertes como Civic y Cruze. Los demás están un poco avejentados (Focus, Corolla, 408, C4 Lounge), pero los de PSA todavía dan pelea con el poderoso 1.6 THP de 163 caballos. Al nuevo VW no le importa nada, se mira el ombligo y anuncia un precio casi premium al menos en esta versión full que probamos a fondo durante una semana.
DISEÑO/ESTILO
Posicionado entre el Virtus y el Passat en la gama de sedanes de VW, y con 4,7 metros de largo (5 más que el anterior), el Vento es uno de los medianos más grandes del segmento medio y el estilo a mi juicio es agradable, original. Sobrio como todo VW, no deslumbra pero está más que bien, y con 2,68 metros entre ejes (3 cm más) obtiene buenas cotas en el interior, sin dejar de mencionar el voluminoso baúl de 510 litros. Lo malo es que bajo la alfombra (de malísima calidad) esconde un auxilio temporal cuando hay lugar para uno “normal”.
INTERIOR/CONFORT
Aunque algo más alta que antes, la posición de manejo es muy buena, con butaca cómoda regulable eléctricamente. Está tapizada en eco-cuero con “agujeritos” por donde sale ventilación fresca en tres intensidades, sistema ideal para el verano y que se suma a la calefacción.
Si bien algunos plásticos inferiores no son de la mejor manufactura, es de muy buena calidad todo lo que recubre el panel (soft touch), moderno pero extremadamente sobrio. Resulta agradable la consola orientada hacia el conductor, donde es protagonista la pantalla táctil de 8 pulgadas, de gran definición y con múltiples funciones, como la operación de la multimedia (con Android Auto y Apple Carplay además de reproductor de CDs en la guantera), seteos del auto y visualización de la cámara de retroceso.
Buena nota para el tablero digital/virtual ya visto en los Polo/Virtus (ver prueba). Si querés agujas, las tenés. Si querés mapa, lo tenés. Si querés data, la tenés. Todo en un mismo cuadro con buena definición y lectura fácil.
Atrás es muy cómodo para dos y se nota el plus de 2 cm a lo ancho (1,8 metros) de esta nueva carrocería. Sobra espacio para las piernas, el respaldo está bastante inclinado y como el techo de cristal corre por fuera, no le quita preciados centímetros a lo alto… no llega a rozar la peluca. Al medio el asiento no es amigable y el voluminoso falso túnel de transmisión molesta y mucho.
Impecable la insonorización y también la climatización. La vida a bordo es confortable y se aprovechan buenos ítems de equipamiento, como la “entrada fácil” sin llave o el cargador inalámbrico para no tener que andar enchufando el teléfono.
MOTOR/PRESTACIONES
Qué más decir que no se haya dicho ya de este ultra eficiente 1.4 TSI, que entrega sus 150 caballos en una meseta entre las 4.500 y 6.000 rpm, y su abultado torque de 250 Nm entre 1.500 y 3.500 rpm. Esos números se traducen en la práctica en un motor muy elástico, con entrega total a muy bajas vueltas, ideal para mantener una marcha ágil en ciudad sin exigir en vano la mecánica.
Por la misma cualidad, es posible viajar en sexta a 100 km/h a apenas 1.800 rpm, o a 130 a 2.300, logrando consumos bajísimos. Es realmente económico y logra buena autonomía a pesar del tanque de 50 litros, bastante mezquino. Todo ese virtuosismo en baja no le quita vigor en alta, y no deja dudas a medio régimen, con reacciones contundentes.
Aunque suave y eficiente, la nueva caja no es tan rápida como la DSG, patina más y tiene una marcha menos. Sin embargo las aceleraciones son incluso (levemente) mejores, con un cero-cien en apenas 8,8 segundos y 16,4 para los 400 metros. Excelentes números para un mediano familiar que no se presenta como deportivo.
Como dato de color, se pueden elegir tres modalidades de manejo: Sport, Normal y Eco, que modifican el tacto del acelerador, la gestión de la caja y la climatización. Lo malo es que en el modo manual no se puede pasar cambios con las levas del volante… ¡porque no las tiene! Habrá que hacerlo desde el selector y no esperar respuestas tan inmediatas como las de la DSG.
COMPORTAMIENTO
Más allá de las críticas, el cambio en la suspensión trasera no degradó el confort de marcha, satisfactorio incluso con los neumáticos de 17 pulgadas y perfil bastante bajo. Tiene que estar muy desparejo el camino para que transmita vibraciones o asperezas. En curvas de baja o alta velocidad el desempeño es bueno, y aunque se inclina porque su puesta a punto no es deportiva, apoya y dobla bien.
Se destaca el trabajo de la dirección, de dureza variable, rápida y con un reducido diámetro de giro.
Digamos que el equilibrio dinámico está muy conseguido y sólo en algunas situaciones muy particulares (caminos de tierra o ripio por ejemplo) se puede extrañar la suspensión trasera independiente.
SEGURIDAD
Por el momento no hay crash test de esta nueva carrocería pero VW asegura que cumple con las normas más exigentes en protección de ocupantes. Sí podemos dar fe de su buen desempeño es el ESP, que sólo actúa cuando hace falta y no altera la maniobrabilidad del auto.
Los seis airbags son de serie y los frenos -con cuatro discos- tienen buen tacto y si bien no son los más potentes, detienen el auto en distancias adecuadas. Le faltan algunos sistemas que ofrece en otros mercados, como el sensor de ángulo ciego y algunas ayudas a la conducción que justificarían un poco mejor su precio pero bueno, tampoco está mal lo que ofrece.
Mención especial para las luces, con LEDs en altas y bajas. Bien blancas, gran alcance e impecable distribución. Diez puntos.
PRECIO/COMPETENCIA
A pesar de no pagar el 35% de arancel de importación por venir de México, el Vento es caro. El Comfortline se ofrece hoy a 930.000 pesos, y este Highline full asciende a 1.091.000… es decir “un palito cien”. Es más costoso que todos sus rivales, pero más accesible que el Civic EXT (turbo), que se publica a descabellados 39 mil dólares.
Veremos si a esos valores el mercado -golpeado por la devaluación- lo acompaña. Prestigio no le falta y quizá haya usuarios dispuestos a pagar un plus por subirse a un Vento, que además ha dado muestras de ser un auto confiable. La caja DSG del modelo anterior fue algo problemática en algunas unidades, defecto que quizá sopesó para remplazarla por la más convencional Tiptronic, que en Estados Unidos tiene ocho marchas, dos más que acá.
Así las cosas, el Vento ya no se distancia tanto de sus rivales a nivel producto como antes, pero sigue en la línea de los mejores. Es un mini Passat que, a pesar de algunas economías o involuciones, no defrauda a nadie, así sea conductor o pasajero. Y eso no es poco.
Lo Bueno
Motor y prestaciones
Espacio interior
Nivel de seguridad
Equipamiento de confort
Equilibrio dinámico
Lo Malo
Detalles de terminación
Precio elevado
Auxilio temporal
Involución caja/suspensión
Gama reducida
FICHA TECNICA
Motor
4 cilindros, 16 válvulas
Cilindrada: 1.395 cm3
Alimentación: Nafta
Potencia: 150 CV entre 4500 y 6000 rpm
Torque: 25,5 kgm entre 1500 y 3500 rpm
Transimisión
Caja: Automática de seis marchas
Tracción: Delantera
Frenos: Disco ventilado/Disco
Tren de Rodaje
Suspensiones: McPherson/Eje torsional
Dirección: Eléctrica
Neumáticos: 205/55 x 17″
Dimensiones y Capacidades
Largo/Ancho/Alto: 4,697/1,799/1,459 mm
Peso: 1373 kg
Baúl: 510 litros
Tanque: 50 litros
EQUIPAMIENTO DE CONFORT
Acceso y arranque sin llave
Butaca conductor eléctrica con regulación en altura
Butacas con calefacción y ventilación
Cámara de retroceso
Cargador inalámbrico de celulares
Climatizador de doble vía
Control de crucero
Encendido automático de luces
Freno de estacionamiento eléctrico
Llantas de aleación
Pantalla táctil con navegador
Sistema multimedia con aplicaciones
Pack eléctrico
Sensor de estacionamiento del./tras.
Sensor de lluvia
Tapizado de cuero
Techo corredizo eléctrico
EQUIPAMIENTO DE SEGURIDAD
Airbags frontales y laterales del.
Windowbags
ABS
Apoyacabezas (5)
Cinturones inerciales (5)
Control de tracción y estabilidad
Isofix
Luces diurnas LED
Faros principales full led
Luces antiniebla delanteros
PRESTACIONES
Aceleraciones
0-100 km/h: 8,8 s.
0-400 metros: 16,4 s.
0-1000 metros: 29,8 s.
Recuperaciones
80-120 km/h en D: 5,9 s.
Frenada
100-0 km/h: 40,5 mts.
140-0 km/h: 78,2 mts.
Consumos
100 km/h: 4,8 litros/100 km.
130 km/h: 6,7 litros/100 km.
Urbano: 10,6 litros/100 km.
5 Comments
Agustín
14 septiembre, 2018, 4:18 pmOsea que este vento volvió a tener el comportamiento dinamico del vento 2.5 mk6 con barra de torsión ? O son más blandos las suspesiones y se asemeja más a un cruze?
REPLYEnzo
15 septiembre, 2018, 12:01 amPara cuándo el informe en TN Autos?
REPLYGustavo
16 septiembre, 2018, 12:06 pmMatias, de tanta TV te banco ahí. Pero
REPLYMe sorprende la calidad de tu redacción. Me recordaste al ídolo de mi juventud y la Corsa. El Colorado Figueras. El Vento, ok. Quedó claro. Además de horrible, argentinizado en calidad, con esa suspensión, caja y terminaciones. Saludos. Habrá que leerte. Abrazo
Luciano
15 octubre, 2018, 9:23 pmMatías, que placer volver a leerte!! un abrazo monstruo del periodismo automotor!!
REPLYLuciano
15 octubre, 2018, 9:26 pmTengo un vento TDI 1.9 2006 (el luxury wood) desde hace casi 9 años (lo compré con 36000 km reales) y no lo cambiaría por nada!! ya tiene 200000 kms pero no sabés lo bien que anda! un abrazo nuevamente
REPLY