La marca china BAIC, que desde fines de 2017 vende modelos en la Argentina, tiene una gama de productos denominada BJ (Beijing Jeep) con una fuerte inspiración en la tradicional marca americana de todo terrenos.

Los BJ20 y BJ40 ya coquetearon con el mercado argentino: el primero fue pensado para las novedades 2020 y el segundo apareció tímidamente en el Instagram local de la marca, pero aun siguen sin confirmarse definitivamente.

La novedad es que este último se está expandiendo por Europa gracias a DR, un importador italiano que ya vende en el Viejo Continente modelos de Chery y JAC.

Ahora, bajo la marca Ickx (que no tiene nada que ver con Jacky Ickx, el piloto belga de Fórmula Uno) y el nombre K2, este particular SUV comenzó a venderse en Italia, llegará pronto a España y promete expandir su comercialización.

Como decíamos, el diseño tiene muchísimas similitudes con el Wranger Unlimited por fuera, aunque es bastante más pequeño: con 4,64 metros de largo, es 24 cm más corto que el modelo de Stellantis. Incluso puede desnudar su carrocería tal y como hace el heredero del Willys.

Por dentro, el parecido es con los modelos de Mercedes, tanto en las pantallas como en las salidas de aire, por ejemplo. Tiene espacio para cinco pasajeros y un abúla al que se acede por un portón de apertura lateral, con el auxilio colgando.

Lo mejor está en la mecánica. El motor es un 2.0 turbodiesel de 162 CV, acompañado de una caja automática de ocho marchas, que cuenta no solo con tracción integral permanente, sino también con reductora y bloqueos de diferencial delantero y trasero.

Donde falla un poco es en el equipamiento, que solo ofrece doble airbag y ESP. También viene de serie con llantas de 20″, tablero digital, pantalla táctil de 12″, butaca eléctrica, tapizado de cuero y control crucero.

Como en muchos modelos chinos, el gancho está en el precio: dependiendo el mercado, apenas pasa los 50.000 euros, cuando un Wrangler no suele bajar de los 80.000 en Europa.