Con un nombre conocido, pero con una propuesta novedosa, el Citroën Ami llegó al mercado europeo en 2020. Se trata de un biplaza eléctrico que se ubica dentro de la categoría de los cuadriciclos, como el Coradir Tito, por ejemplo.

Su llegada a la región está en estudio y Citroën aprovechó para exponerlo por primera vez en la Argentina, pero la marca no habló nada acerca de un posible desembarco en nuestro mercado, algo que por ahora vemos como muy lejano.

El motor eléctrico es de solo 8 CV, lo impulsa hasta un máximo de 45 km/h y las baterías ofrecen hasta 75 km de autonomía, más que suficiente para traslados urbanos. Estas pueden recargarse en una toma convencional de 220 voltios en solo tres horas.

Mide apenas 2,40 metros de largo, 1,39 de ancho, 1,52 de alto y pesa menos de 500 kilos. El diseño es particular, costando saber si está de frente o de cola (algo reconocible por el color de las luces).

Las puertas abren en sentido opuesto: tipo suicida la del conductor y de manera convencional la del acompañante, con lo cual son idénticas, algo que ahorra costos de producción. Además, las ventanillas abren hacia arriba, como se hacía en el 2CV, y el techo es acristalado.

El equipamiento es básico, sin airbags, ABS, ESP, pack eléctrico, aire acondicionado o radio (se utiliza el celular). También existe una versión cargo, sin asiento del acompañante, para entregas urbanas. Ambos son fabricados en Marruecos.