Aunque el metaverso nos suene a las cinco últimas letras de esa palabra (gracias Ricardo), lo cierto es que ese mundo virtual crece a pasos agigantados. Tanto, que BMW está pensando seriamente en ello y el prototipo i Vision DEE así lo demuestra.

DEE viene de Digital Emotional Experience y se anuncia como un portal al mundo digital en el que el automóvil se transforma en un compañero inteligente. No por nada, en su presentación, BMW trajo a Kitt, el Auto Fantástico de los ochenta o a Herbie, el entrañable Escarabajo de los sesenta, para charlar con su última creación.

Este prototipo posee un Head Up Display (algo en lo que BMW ha sido pionero) que ocupa todo el ancho del parabrisas. En el mundo real servirá para mostrar informaciones, algo que estará disponible en los modelos de la marca desde 2025.

Pero esa pantalla, y las ventanillas laterales, servirán de acceso al mundo virtual cuando el conductor así lo requiera. BMW no fue especialmente explicativo en este punto, pero tal vez no lo entenderíamos si así lo hubiera hecho.

La conexión con el entorno se da también en el frente, ya que la parrilla es una doble pantalla que forma riñones apaisados y puede adoptar expresiones faciales de bienvenida y estados de ánimo. El diseño es similar a lo que ya se vio en el iVision Circular (ver más), con el doble faro en forma de líneas.

Otra novedad del DEE es que evoluciona la pintura mostrada en el iX Flow (ver más). Aquel concept podía intercambiar entre blanco y negro, pero este nuevo modelo permite hasta 32 colores gracias a que la carrocería está dividida en 240 segmentos. El patrón es a elección del cada conductor y con semejante cantidad de opciones, las posibilidades de personalización son casi infinitas.

En cuanto al diseño, el i Vision DEE recurre a una silueta clásica, sin caer en el formato fastback que parecía inevitable para todos los sedanes eléctricos. BMW no lo aclara, pero pareciera adelantar un futuro i3 que podría llegar en 2025.