Con motivo del cincuenta aniversario de la llegada del primer vehículo tripulado de cuatro ruedas a la luna, el año pasado te contamos la historia de los rover que recorrieron por primera vez una superficie que no fuera la terrestre (ver más).

Pues bien, hoy se cumple medio siglo desde el último recorrido de estos rover lunares, que se dio el 13 de diciembre de 1972, en lo que fuera la última misión tripulada a nuestro satélite.

Los rover conducidos por humanos debutaron en 1971, con el Apolo 15 (en julio de 1971), continuaron al año siguiente (en abril de 1972) y finalizaron en diciembre de ese año, cuando estuvieron al mando Eugene Cernan y Harrison Schmitt.

Este último fue el vehículo que más recorrió en la superficie lunar, alcanzado más de 35 km en etapas que nunca superaron una distancia de más de 10 km del módulo lunar.

Los rover pesaban menos de 230 kilos, pero eran capaces de cargar más de 500 kilos. Tenían la capacidad de llevar a dos astronautas y medían 3,10 metros de largo y 1,80 de ancho, con un despeje de 35 cm.

Llevaban cuatro motores eléctricos, uno por rueda (que no eran neumáticos llenos de aire, sino realizados con mallas de acero), con una autonomía total de 180 km.

Desde ese día, ningún humano volvió a tocar la luna y aunque hay varias misiones programadas para regresar a su superficie, nada hace pensar que tengamos pronto otro conductor fuera de nuestro planeta.