Está casi todo listo para recibir a la nueva generación de la Ranger, que saldrá al mercado argentino el año que viene (ver más). Y gran parte de la inversión de 580 millones de dólares para producirla en la Argentina, comienza a verse en la planta de Pacheco.

La filial local dice que este proceso de transformación es el más importante que ha atravesado la planta de Pacheco en sus 60 años de historia (ver más). El mismo se inició a principios del año pasado y avanza con la modernización integral de sus instalaciones y operaciones productivas, incorporando equipamiento y tecnologías que la posicionarán como una de las fábricas automotrices más avanzadas de Sudamérica, además de destinar un 30 por ciento de las inversiones al desarrollo de autopartes de origen nacional.

El plan de ejecución requirió de varias etapas antes de completarse: este segundo paso, que se desarrolló en abril y mayo de este año y requirió detener los procesos productivos durante seis semanas (lo que explica la baja en ventas que tuvo el modelo actual), incluyó la instalación y validación de equipamientos de última generación alineados a los utilizados en las plantas más modernas de Ford en el mundo.

El sector de Carrocería incorporó más de 300 robots de soldadura automática que operan sincronizados para formar la caja y la cabina de Ranger. Estas tecnologías llevaron a ampliar en alrededor de un 90 por ciento la capacidad instalada del área y eliminó las soldaduras manuales en las operaciones principales.

El área de Estampado inició las pruebas para poner en funcionamiento la nueva línea de prensas de alta velocidad. Esta tiene 59 metros de largo por 12 de ancho y permitirá ampliar hasta cuatro veces la cantidad de piezas finalizadas por hora dada sus capacidades de golpe y estampado en simultáneo.

En Montaje se completó la transformación de las líneas de Chasis y Tapicería, aumentando las capacidades de producción. Estas cuentan ahora con transportadores aéreos individuales y autónomos que movilizan las piezas de Ranger de un lugar a otro: el motor va por un carril; el chasis por otro; al igual que la cabina y la caja; hasta “encontrarse” en un punto determinado donde se realiza el ensamblaje de todas las partes.

La tecnología 4.0 se hizo presente en los procesos de abastecimiento, con la implementación de nuevo software, que permitió automatizar la logística interna de la planta, tanto con la cadena de suministros, como con las propias líneas productivas, optimizando el proceso de stock y distribución de las piezas necesarias para la fabricación de Ranger.

Junto con las novedades, Pacheco cambió techos, pisos y las luminarias, que están siendo reemplazadas por tecnología LED de control automático, que brinda niveles óptimos de luminosidad y contribuye a la sustentabilidad de Pacheco gracias a su bajo consumo energético.

A su vez, la planta incorporó desde 2020 más de 400 nuevos colaboradores para cubrir la creciente demanda en Sudamérica. Este avance permitió sumar nuevos destinos de exportación, como República Dominicana, Guatemala y Panamá (ver más), a los mercados de la región donde Pacheco ya destina el 70 por ciento de su producción.