Kia lanzó la cuarta generación del Sorento en la Argentina, el SUV grande de la marca con capacidad para siete pasajeros que llega importado de Corea del Sur.

Lo hace con una única versión equipada con el motor 2.2 turbodiesel de 202 CV que ya probamos en la Carnival (ver prueba). La mecánica se une a una caja automática de ocho marchas con levas al volante y la tracción integral, con modos nieve, arena y barro.

La nueva Sorento mide casi lo mismo que la anterior, con 4,81 metros de largo, 1,90 de ancho, 1,70 de alto y 2,82 entre ejes.  

Los principales cambios, más allá del cambio de plataforma, se ven en el diseño, con una trompa que adopta trazos rectos y una cola con unas particulares luces verticales divididas en dos secciones. 

En el lateral aparece una suerte de “aleta de tiburón” al mejor estilo DS a modo de parante C, para dividir la segunda de la tercera ventanilla.

En el interior se ven tres pantallas: la del conductor que oficia como instrumental tras el volante, la central multimedia y una pequeña inferior para la climatización. El selector de cambios es del tipo circular, pero hay levas tras el volante.

El equipamiento incluye seis airbags, ESP, frenado autónomo de emergencia, control crucero adaptativo, centrado de carril, alerta de punto ciego y de fatiga, luces altas automáticas, faros full led, arranque en pendiente, control de descenso, cámara 360°, butacas calefaccionadas y ventiladas, techo panorámico, llantas de 19″, tablero digital, pantalla táctil de 8″, sensor de estacionamiento y de lluvia, encendido automático de luces, acceso y arranque sin llave, cargador inalámbrico.

El modelo se venderá en la Argentina con un precio de 120.000 dólares, con la garantía de 5 años o 150.000 km y con el agregado de un NFT creado por Milo Lockett que además vendrá con un acceso a beneficios exclusivos durante el primer año.