El Fiat 600 fue, con el 500 (que apareció dos años después), el encargado de motorizar a Italia luego de la Segunda Guerra Mundial, algo similar a lo que sucedió en Francia con el Citroën 2CV y en Alemania con el Beetle.

Se produjo en la península entre 1955 y 1969, pero también se fabricó en otras plantas europeas filiales de la italiana, como la de Zastava en Yugoslavia, la de Seat en España y y la de NSU en Alemania. Incluso Abarth le puso su logo no solo para las competiciones.

Fuera del Viejo Continente también fue armado en Chile, pero su gran éxito lo cosechó en la Argentina, donde superó las 300.000 unidades producidas, con el mismo diseño que tenía la versión original, entre 1960 y 1982.

Sin embargo, en Italia y España, el modelo ganó varias carrocerías que nunca estuvieron disponibles en la Argentina. Como ya hemos hecho con los Fiat 128 (ver más) y 147 (ver más), vamos a repasar esas curiosas versiones.

La 600 Multipla fue el modelo más extraño de la gama (y uno de los más raros de su tiempo). Antecesor del concepto monovolumen, incorporaba una puerta donde está el guardabarro delantero en la berlina y adelantaba la plancha para así ofrecer, en algunas versiones, tres filas de asientos. El sector posterior era idéntico. Medía 33 cm más de largo y se produjo de 1956 a 1967.

Sobre la Múltipla, Fiat también produjo un furgón, que tenía un remate posterior distinto para mejorar la capacidad de carga. Se llamó 600 T y se produjo de 1956 a 1964, cuando lo reemplazó el 850 T, con nuevo diseño.

Solo unos años después, en 1958, el carrocero Ghia creó esta versión “camping” denominada Jolly, con asientos de mimbre y techo de lona. Parece una más de las muchas variantes “one off” que tuvo el 600, pero este se produjo entre 1958 y 1962. Costaba el doble que un 60o tradicional y fue utilizado por algunos célebres millonarios.

Seat produjo el 600 en España sin grandes diferencias, pero en 1964 agregó a la gama un inédito cuatro puertas que fue denominado 800 y medía 18 cm más de largo (algo así como el Siete, otro español, del Renault 5). No fue muy exitoso y se dejó de hacer en 1967.

La reinterpretación de 1998 del 600 se denominó Seicento (con letras, al igual que el Cinqucento de 1991), aunque para el 50° aniversario del modelo (en 2005) pasó a llamarse 600 con números. Con un diseño naturalmente más moderno, mantenía el espíritu del original, con solo 21 cm más en el largo total y la distancia entre ejes. Se produjo en Polonia hasta 2010.