Tal vez no lo sabías, pero el Toyota 86 (ver prueba) fue desarrollado junto a Subaru, que dio vida al BRZ, un modelo idéntico en gran parte de su aspecto. De hecho es fabricado por esta última, que también proveyó el motor bóxer.

Ahora, Subaru reveló la segunda generación del modelo, y esperamos que Toyota haga lo propio dentro de poco. Si bien se trata de un automóvil totalmente nuevo, su aspecto es muy similar y las medidas prácticamente las mismas del anterior.

Los cambios se ven en las ópticas delanteras y traseras, los paragolpes, la parrilla, un pliegue en el guadabarros delantero que se une a un prominente zócalo, un corte distinto para la pequeña ventanilla posterior y un portapatente que dejó el portón posterior.

Por dentro ganó protagonismo la multimedia y el tablero es digital, pero se mantiene la sobriedad y la consola central elevada que separa ambas butacas.

El motor es un nuevo bóxer, ahora con 2.4 litros y 228 CV, siempre unido a la tracción posterior y a una caja que puede ser manual o automática.

Se mantiene el bajo peso para garantizar buenas prestaciones, sumo un modo track para desempeño en pista y además se reforzó un 60 por ciento la rigidez torsional, junto a otras modificaciones del chasis. Hay llantas de 17 o de 18 pulgadas en los mercados donde se está estrenando.

Ahora resta esperar la aparición del Toyota 86 y luego la confirmación de su llegada al mercado argentino, donde seguramente volverá a ser ofrecido.