A causa de la pandemia, en Brasil postergaron dos años el ingreso de la normativa. Habrá que ver qué sucede en nuestro mercado.
Las automotrices brasileñas lograron que el Consejo Nacional de Tránsito de ese país postergue la obligatoriedad del control de estabilidad para todos los modelos.
El equipamiento, que ya es obligatorio para los modelos nuevos que salen al mercado, iba a tener que ofrecerse en todos los modelos que se vendan a partir de enero de 2022, pero ahora esa obligatoriedad pasó para 2024.
Habrá que ver qué sucede en la Argentina, pero como Brasil es el mayor productor para la región, se descuenta que las terminales radicadas aquí elevarán el mismo pedido.
De no plegarse el Estado argentino, los modelos que se producen en Brasil sin el control de estabilidad deberían incorporarlo únicamente para venderse en la Argentina, algo muy poco probable.
Los modelos actualmente a la venta que debían incorporarlo para seguirse vendiendo en 2022 son los BAIC Senova; Chery QQ; Chevrolet Joy, Montana y Spin; Citroën C3, C3 Aircross y Berlingo, Fiat Mobi y Fiorino, Honda W-RV, Kia Picanto, Nissan Versa V-Drive, Peugeot Partner, Renault Kwidy Oroch y Volkswagen Up, Gol y Voyage.
Seguramente en la semana próxima, a raiz de esta noticia para el mercado brasileño, haya novedades para el argentino.
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