Cuando Ford anunció que no vendería la Ranger Raptor en Estados Unidos, seguramente muchos clientes pensaron que jamás podrían acceder a una versión de estas características.

Pero la marca del óvalo lanzó el paquete Tremor, que a partir del año que viene estará destinado para los norteamericanos con casi las mismas características de nuestra Raptor (ver prueba).

El gran cambio se da en el motor, que como el resto de las Ranger se valdrá del 2.3 EcoBoost de 270 CV, siempre unido a la caja automática de 10 marchas y la tracción integral.

Como diferenciadores de la Ranger clásica, la Tremor se vale de los amortiguadores Fox, una nueva barra estabilizadora, bloqueo electrónico de diferencial trasero y neumáticos todo terreno montados en llantas negras de 17″, tal cual sucede con la Raptor tailandesa.

Además, la Tremor suma un sistema denominado Trail Control con cuatro modos de manejo y reduce su capacidad de carga a 650 kilos.

La estética es tranquila, ya que los calcos laterales son opcionales. El resto es casi igual, con el paragolpes específico de la versión yanqui. Solo hay nuevos estribos laterales debido a un despeje que crece 20 mm.

Por dentro solo aparece una nueva botonera en lo alto de la consola destinada a comandar los muchos accesorios que se pueden montar en esta versión.