Coradir es una empresa, según su página web, dedicada al desarrollo de equipos electrónicos e informáticos, venta de servicios de Internet, integración de sistemas y desarrollo de software a medida.

Pero ahora sumará un nuevo emprendimiento: la producción de automóviles en su planta de San Luis. El hecho de elaborar baterías para smartphones y luego para movilidad, derivó en la fabricación de este modelo, que toma su diseño de un eléctrico chino.

Las especificaciones del Tito, tal como fue bautizado, ya fueron subidas a la página de la compañía. Allí se detalla que lleva una batería de litio que permite una autonomía de 100 km. La recarga se logra a través de un enchufe convencional a 220V y demanda 8 horas para completarse.

El Tito, que aun espera por la homologación (L7/b) para poder circular, cuenta con cuatro plazas, pantalla táctil con cámara, cierre centralizado, levantavidrios eléctricos y plazas traseras rebatibles para crear un espacio de carga respetable. La velocidad máxima es de 65 km/h.

En declaraciones a distintos medios puntanos, Juan Manuel Barreto, el presidente de Coradir, señala que la empresa invirtió 1,5 millones de dólares para montar la producción que, por ahora, cuenta con muchos componentes importados de China, aunque la idea es irlos reemplazando por piezas locales.

Aun sin precio confirmado, Barreto confirmó que saldrá unos 10.000 dólares al cambio oficial, lo que hoy son unos 720.000 pesos, es decir la mitad de lo que cuesta el Volt cordobés (ver más). Con la habilitación, se podrá poner a la venta, algo que se prevé para fin de año.

La compañía no solo se conforma con la producción del Tito. Ya está pensando en un sedán de mayor tamaño (con velocidad de 120 km/h) y en un utilitario para entregas urbanas.