Hace tiempo, nos acostumbramos a que una nueva generación tenía que tener una nueva plataforma para ser catalogada como tal, pero con el paso de los años y la modernidad de las arquitecturas, no siempre esa fue una condición esencial.

Sin embargo, es la primera vez que tenemos por delante lo que ha hecho Hyundai: renovar la plataforma, pero como parte del restyling de un modelo.

En este caso se trata de la cuarta generación del Santa Fe, que debutó hace apenas dos años (es corto tiempo hasta para un rediseño) y desde el año pasado se vende en el país. Según Hyundai, la nueva plataforma permitió mejoras tanto en la dinámica, confort y seguridad.

La nueva base no ha cambiado las medidas del SUV, que permanecen casi igual, pero la marca sí aprovechó para un profundo rediseño frontal, manteniendo el doble faro, pero adoptando una forma de T en la iluminación diurna.

También cambia la parrilla, de mayor tamaño. Los laterales y la cola (ahora con un filete que une ambas ópticas traseras) no muestran grandes modificaciones.

Por dentro el mayor cambio se da en la consola central, más elevada, que deja atrás la clásica selectora para adoptar una transmisión comandada por botones. También aparecen los comandos del nuevo sistema de tracción, que incluye hasta seis modos de conducción.

Lo que se mantiene inalterado es la posibilidad de llevar siete pasajeros en tres filas de asientos. Recordemos que la actual generación nunca adoptó la carrocería larga de la Grand Santa Fe.