La esperada versión RS del Onix debutó en el mercado colombiano, junto a toda la gama del nuevo modelo regional de General Motors, incluyendo las siluetas hatch y sedán (Onix Plus).

Pese a las expectativas, la versión deportiva del Onix no ganó un nuevo motor y se quedó con el tradicional 1.0 turbo de 116 CV, acompañado de la caja manual de cinco marchas, cuando algunos especulaban con la versión turbo del motor 1.2 que ya debutó en la Tracker, con 132 CV (ver más).

El 1.0 turbo será el único motor disponible en Colombia, en tanto los niveles de equipamiento son similares a los que ofrece en la Argentina (ver más), con seis airbags y control de estabilidad de serie.

Incluso el RS está un escalón por debajo del Premier (ver prueba), sin poder ofrecer climatizador automático, estacionamiento asistido, wifi o cargador inalámbrico.

Donde sí se distingue el RS es en algunos elementos exclusivos en el exterior, como la presencia del color negro en las llantas de aleación de 16 pulgadas, el borde de las luces delanteras, todo el techo, los espejos exteriores, el spoiler trasero y la parrilla (donde exhibe el logo RS, que se repite en el portón). Por dentro apenas se contenta con un volante y tapizados exclusivos.

Con esas pocas modificaciones, que ya estaban disponibles en el catálogo brasileño en forma de accesorios, no es extraño que la versión pueda llegar pronto al mercado argentino, aunque no perdemos la esperanza de que el retraso esté atado a la posibilidad de montar un propulsor algo más picante que el del resto de la gama.