La quinta generación del icónico Jimny ya está a la venta oficialmente en el país, tras la preventa que se inició en abril. Se trata del cuarto modelo de la marca en la Argentina, junto con los Vitara, Baleno y Swift.

Importado de Japón, mide 3,65 metros de largo y solo viene con la carrocería de dos puertas y portón de apertura lateral. El interior ofrece espacio para cuatro pasajeros y el baúl, tan solo 85 litros (377 con los asientos rebatidos).

El motor es un 1.5 de 100 CV asociado a una caja manual de cinco marchas o una automática de cuatro. En ambos caos la tracción es integral conectable, con reductora. El chasis es de largueros.

Hay un único nivel de equipamiento, con la salvedad que puede pedirse con carrocería bitono por 500 dólares extra. De serie trae seis airbags, ESP, control de descenso y arranque en pendiente, isofix, control crucero, pantalla táctil, llantas de aleación

Los precios son de 33.000 dólares para el GLX manual y de 34.500 para el automático. Por su tamaño y características, no tiene rivales directos en la Argentina, siendo el Jeep Wrangler 2 puertas lo más cercano, a 2.300.000 pesos, pero con motor de 280 CV.