Por primera vez, el deportivo de la Serie 5 de BMW adopta un motor híbrido. Ahora es un enchufable que eleva más de 100 CV la potencia del anterior.
La nueva generación del BMW M5, la séptima desde su aparición en 1984 (el Serie 5 va por la octava), estrenó una motorización híbrida enchufable.
El motor de combustión es el mismo V8 de 4.4 litros del anterior, solo que la potencia se redujo de 600 a 585 CV. Ahora se le suma un eléctrico de 197 CV para entregar 727 caballos en total.
El motor eléctrico va integrado a la caja de cambios, que es una automática de ocho marchas. Además, tiene dirección y tracción en las cuatro ruedas.
La ventaja es que puede recorrer 69 km únicamente con el motor eléctrico (hasta una máxima de 140 km/h). La desventaja es que no mejoró los registros de aceleración, seguramente por el mayor peso del sistema híbrido.
El M5 puede circular en tracción trasera o integral. Le suma un diferencial posterior activo y amortiguadores de dureza variable. Las llantas son de 20″ en el eje delantero y de 21″ en el trasero. Hay una multitud de opciones de manejo, tanto del sistema híbrido como del dinámico.
En lo estético, los cambios con respecto al Serie 5 son casi decorativos, tanto en la parrilla, los paragolpes y los faldones laterales. Como rivales directos, tiene a los AMG GT y Panamera, otros híbridos que tienen una silueta fastback, lejos de la tradicional sedán de este M5.
Leave a Comment
Your email address will not be published. Required fields are marked with *