Aunque en Brasil el Compass sumó hace muy poco el motor Hurricane de la Rampage con 272 CV (ver más), la actualización del modelo en la Argentina no agregó esta versión.

Es más, con la novedad estética (que solo modifica la parrilla y las llantas), dejó de ofrecerse la versión Trailhawk, la única que sobrevivía con motor Diesel y tracción integral (ver prueba).

La gama se compone de las cinco versiones nafteras conocidas, todas con el motor 1.3 turbo de 175 CV y 270 Nm, asociado a la caja automática de seis marchas y la tracción delantera.

Tampoco hubo novedades en el equipamiento. La versión Sport entrega de serie 6 airbags, faros full led, llantas de 17″, climatizador bizona, acceso y arranque sin llave, control crucero, pantalla táctil de 8″ con cámara, sensor de estacionamiento, sensor de lluvia y encendido automático de luces.

La Longitude agrega llantas de 18″, levas al volante, tapizado de cuero y techo panorámico. La Longitude Plus suma pantalla de 10″, cargador inalámbrico, estacionamiento asistido y encendido remoto.

La Limited agrega airbag de rodilla, frenado autónomo, control crucero adaptativo, alerta de cambio de carril, detector de punto ciego, alerta de tráfico cruzado, detector de señales de tránsito, detector de fatiga, luces altas automáticas, llantas de 19″, pintura bicolor, butaca eléctrica y tablero digital. La Series S solo tiene detalles decorativos, como por ejemplo llantas oscurecidas.

Los precios son de 37.120.000 pesos para la Compass Sport, de 45.388.000 para la Longitude, 46.476.000 para la Longitude Plus, de 47.238.000 para la Limites y de 48.218.000 para la Serie S.