Con la reciente desaparición de las versiones de cabina simple de la Ford Ranger, el segmento de pick ups medianas con esta carrocería quedó animado únicamente por dos propuestas: Hilux y S10.

Es un nicho que lentamente va desapareciendo en la Argentina: Frontier dejó de ofrecerla hace mucho (la actual nunca lo hizo), Amarok la olvidó en 2020, Alaskan ni la contempló y hasta Great Wall dejó de traer de China la Wingle con esa carrocería.

En el resto de las pick ups, la cabina simple es una opción que solo quedó entre las derivadas de autos (Strada y Saveiro) y en las frontales que llegan de China. No figura en las intermedias o en las full size, como históricamente tuvieron las F-100 o Silverado.

De las propuestas actuales, decimos que Hilux casi monopoliza el segmento debido a las restricciones, que minimizan las ventas de la Chevrolet S10 brasileña en toda su gama.

General Motors no detalla cuántas cabina simple vendió su S10, pero el modelo patentó, de todas sus versiones, apenas 1.180 unidades en el primer semestre. En cambio, Toyota admite que un 10 por ciento de las ventas de Hilux (sumaron más de 15.000 en lo que va del año) son de la versión de cabina simple.

Ambas opciones están asociadas a los equipamientos de entrada, pero muestran bastantes diferencias en lo mecánico: mientras la Hilux tiene versiones 4×2 y 4×4, la S10 solo ofrece una con tracción integral.

Además, el motor de la Chevrolet es un 2.8 de 200 CV y 440 Nm, en tanto el de la Toyota es un 2.4 de 150 CV y 400 Nm. Ambos se unen a cajas manuales de seis marchas.

En cuanto a equipamiento, son realmente básicos. La S10 ofrece 6 airbags, llantas de chapa de 16″, paragolpes color carrocería, levantavidrios eléctricos y cierre centralizado y la Hilux 7 airbags, llantas de chapa de 17″, paragolpes color carrocería y pantalla táctil de 8″.

En cuanto a precios, la Hilux DX 4×2 cuesta 10.310.000 pesos, la DX 4×4 12.277.000 y la S10 LS 4×4 12.430.900 pesos.