Llega a poco menos de cuatro años del debut de la quinta generación. Cambia la trompa, con nuevas luces diurnas verticales que llevarán otros Renault.
Ausente desde la tercera generación, que se estrenó en 2005 en Europa, el Renault Clio acaba de recibir el primer rediseño de la quinta generación, la cual se vende desde 2019.
El cambio más importante se ve en la trompa, con nuevas luces, parrilla y paragolpes. Pero lo que más resalta en la novedad son los faros diurnos dispuestos de una tira vertical que quiebra su formato a la mitad.
En el resto del diseño, tanto exterior como interior, hay pocas modificaciones. Se sumaron texturas sustentables y se eliminó por completo el cuero animal.
Se mantienen los instrumentales de 7 o 10 pulgadas y las pantallas táctiles de 7 o 9, esta última dispuesta en sentido vertical. Por primera vez, el Clio suma una versión Alpine, con detalles estéticos deportivos.
En cuanto a motores, no hay incorporaciones, sino dos bajas, con 67 y 140 CV. Se mantienen las opciones de 91, 100, 101 (única diesel) y 145 CV (única híbrida).
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