Ya dentro de Stallantis, Dodge está tratando de regresar a sus mejores épocas. Recientemente, se incorporó a la gama el Hornet (un clon del Alfa Romeo Tonale, ver más), pero su clásica coupé ya tiene fecha de caducidad a la espera de los modelos eléctricos.

Hablamos del Challenger, que acaba de presentar su versión despedida, con un V8 Hemi totalmente preparado que alcanza los 1.040 CV y 1.281 Nm. Así, es capaz de acelerar a 100 km/h en menos de dos segundos.

Las modificaciones para llegar a semejante potencia fueron varias sobre el motor de 6.2 litros. Hubo cambios en los inyectores, la bomba de combustible, el cuerpo del acelerador, bujías, bobinas, y un compresor más grande. Si se utiliza nafta E85 sobrepasa los 1.000 CV y se queda en 912 si se utiliza el E15, con enor mezcla de Etanol.

La unión con el suelo de semejante poder también fue revisada. Se reforzó el eje trasero, se adecuó toda la electrónica y los neumáticos tienen medida 245/55 x 18″ adelante y 315/50 x 17″ atrás. Además, hay una suspensión adaptativa y frenos Brembo.

Las prestaciones son increíbles: 243 km/h de máxima junto a una aceleración de 8,91 segundos para llegar al cuarto de milla (400 metros), una auténtica locura para un automóvil de producción.

La edición será limitada, aunque no pequeña. Son 3.000 unidades para Estados Unidos y 300 para Canadá. Estará disponible en 14 colores con un precio cercano a los 100.000 dólares.

El Challenger nació en Estados Unidos en 1970 y se mantuvo sin cambios hasta 1974. Regresó en 1979 como un clon del Mitusbishi Galant (algo común entre Chrysler y la japonesa por esos tiempos) y volvió una vez más, en 2008, con esta generación que empieza a despedirse con esta edición.