Después de muchísimos años de copias casi burdas de modelos de occidente, la industria china está floreciendo con atractivos diseños propios. Y justo cuando esa tendencia se afirma, llegó lo más imprevisto: una marca china acusó a una compatriota de plagio.

El litigio, que aun no llegó a los tribunales chinos, es entre Changan y Geely por la nueva marca Galaxy. El conflicto se centra en la coupé Light, que por ahora es un prototipo de la naciente marca de Geely.

El Light se presentó a fines de febrero y está previsto que llegue a los concesionarios a fin de este año. Tiene una estética que, según Changan, se acerca demasiado a la de los nuevos modelos de su marca, sin especificar a un modelo en particular.

En la carta que Changan le envió a Geely, le pide que detenga estas actividades y se reservó el derecho de tomar acciones legales, según el portal Car News China, pero la primera contestó que “la acusación contra nuestra empresa es infundada y engañosa al público”.

Una de las explicaciones para la inspiración de los nuevos modelos de Geely podría ser el desembarco de Chen Zhengcheng, quien fuera nombrado vicepresidente de diseño de la marca china y responsable de las líneas del Light.

Zhengcheng trabajó durante casi 20 años en Changan antes de unirse a Geely en marzo del año pasado. En su currículum están los Eado, Raeton y la línea Uni.

Las empresas chinas vienen contratando varios ex diseñadores de marcas occidentales para darle un giro a sus novedades. En la lista nombrada por el portal chino están Stefan Sielaff (pasó de Bentley a Geely), Peter Horbury (de Volvo a Geely, que es la dueña de la sueca), Pierre Leclerc (de BMW a Gerat Wall) o Hakan Saracoglu (de Porsche a Chery).