Publicar los precios en la web no es una obligación que tienen las automotrices. De hecho, en 2019 hicimos un informe que detallaba qué marca publicaba valores en pesos, cuál en dólares y las que directamente obviaban informar al navegante de esa información (ver más).

Es ese tiempo, casi la mitad de las automotrices no informaban los valores, pero hoy esa cifra ha crecido. La novedad, y que despertó el interés de esta nota, es que en muchos importados desapareció un valor de referencia para el cliente.

Esto se debe a dos motivos principales: la falta de unidades y la alta inflación. Ese combo conspira para que las propias terminales no sepan cuándo tendrán tal o cual modelo disponible y adelantar hoy el valor que tenga un bien en tan solo un par de meses (o más) es toda una quimera.

La fata de previsibilidad llegó incluso a Toyota, una de las más coherentes con el tema de precios y sobreprecios en la Argentina. Si bien muchos de sus importados carecían de valores (hablamos de toda la gama Lexus y de los GR Yaris y 86, Land Cruiser y CH-R, por ejemplo, que llegan en cuentagotas, y hasta el Rav4, que vende más), ahora tampoco los tiene el Hiace, uno de los extrazona que más unidades vende en la Argentina.

Algo similar pasa con Jeep, que si bien ofrece su lista oficial a la prensa, en la web dejó de mencionar cuánto cuesta el Gladiator y dos de las tres versiones más caras del Wrangler, otros modelos que están llegando con poquísimo caudal.

Al igual que Jeep, todas las marcas de Stellantis informan mes a mes las variaciones en su web de prensa, pero salvo la especialista en SUV, ninguna otra publica precios en la web. Algo que sí hacen Chevrolet, Ford (que tiene muchos importados extrazona en su gama), Nissan, Renault y Volkswagen.

Otros casos sin precios son los de Hyundai, Kia, y Honda, que por ejemplo, ya no informa los valores de los CR-V y Pilot que trae de Estados Unidos. El único precio en la web es el de la HR-V mexicana.

La política de informar, incluso dentro de los importadores, también es dispar. Muchas no lo hacen, pero marcas como Porsche, Mitsubishi, Subaru y Suzuki y chinas como Changan, Chery, las de Famly, Great Wall, Haval o JAC muestran sus valores en dólares. Que después los concesionarios pidan ese precio, es otro cantar.