El Hyundai Kona, que debutó globalmente en 2017 y dos años después llegó a la Argentina (por las restricciones está virtualmente discontinuado en el país), acaba de estrenar su segunda generación.

Aunque sigue siendo un SUV compacto, el tamaño es bastante mayor y crece 15 cm de largo (hasta 4,36 metros), 3 de ancho (1,83) y 6 entre ejes (2,66).

El otro cambio es el estético. La Kona original (ver más) ya tenía un diseño de faros en doble piso, pero ahora adopta lo visto en el Staria (ver más), con una tira led que abarca todo el ancho de la trompa, secundado por los faros tradicionales por debajo. Atrás se repite el esquema casi como un espejo.

Otra de las características del Kona, que se mantendrá en esta generación, es la posibilidad de optar por todo tipo de mecánicas, ya sean naftera (incluida una versión N), híbrida o eléctrica, aunque no hay datos de cada una de ellas. Cada una de estas opciones tendrá su propio diseño, con pequeñas variaciones en el frente.

El interior muestra la doble pantalla para tablero y multimedia que se viene imponiendo en la industria. La selectora de cambios va ubicada en la columna de dirección.