Waymo, la empresa propiedad de Alphabet, la dueña de Google, está muy cerca de poner en las calles de Estados Unidos su taxi autónomo.

El vehículo será producido por la marca Zeekr, parte del gigante chino Geely, que ya está alistando los últimos detalles gracias a pruebas en el frío polar escandinavo.

Pese a que el Zeekr Robotaxi será un vehículo autónomo capaz de llevar pasajeros en un amplio espacio interior sin volante, las pruebas de confiabilidad las está realizando un piloto profesional.

Pese al amplio camuflaje, el taxi autónomo deja claro que sus líneas serán muy similares a las del prototipo presentado hace pocos meses en California, con forma de minivan y puertas laterales corredizas.

Junto con la aparición de un conductor y un volante, en el vehículo de prueba desapareció el radar instalado en el techo que le permite al Zeerk moverse en forma autónoma.

La otra posibilidad acerca de la aparición de este piloto al mando, aunque poco probable, es que Waymo esté pensando en una variante de venta a público para atacar el mercado de las furgonetas, como será el caso de la nueva Volkswagen Kombi eléctrica (ver más).

De una u otra manera, pese al avance irremediable de la robótica, los radares podrán llevarnos con eficiencia y seguridad por donde queremos, pero aun no tienen la sensibilidad de un tester para determinar cuán necesario es, por ejemplo, un ajuste en las suspensiones. Y damos gracias por eso.