AMG es la división deportiva de Mercedes. Nació potenciando los autos de calle de la marca alemana, pero hoy, sin dejar esa importante rama del negocio, también crea autos propios y participa activamente de las competencias internacionales, como por ejemplo el equipo de Fórmula Uno que llevó a Hamilton a ganar siete veces el campeonato de Fórmula Uno.

La empresa nació en 1967, cuando Hans Werner Aufrecht y Eberhard Melcher, dos ex-ingenieros de Daimler-Benz se instalaron en Burgstall con la misión de desarrollar motores de carreras para clientes de Mercedes. De las iniciales de ambos ingenieros y de la ciudad natal de ambos, Großaspach, salieron las siglas AMG.

En 1978, AMG se mudó a la ciudad de Affalterbach y en 1990 firmó un acuerdo de cooperación con Daimler, del que salió el primer vehículo desarrollado en conjunto, el C36 AMG.

Recién en 2010 apareció el primer AMG que no tenía un modelo equiparable en la gama tradicional, el SLS AMG, con motor 6.2 de 571 CV. Para 2014 llegó el primer modelo denominado oficialmente Mercedes-AMG, el GT.

Hoy, AMG es una de las divisiones de Mercedes. La marca alemana funciona como paraguas de su propia gama, pero también de la división deportiva, de Maybach (de super lujo), de G (la rama aventurera) y de EQ (la nueva gama eléctrica).

En la Argentina, AMG ha ido escalando al igual que en otras partes del mundo, pero en 2021 duplicó su participación en las ventas, llegando al 11 por ciento del total de los Mercedes (sin contar utilitarios) vendidos en el país.

Fueron un total de 115 unidades, impulsadas por las restricciones y la búsqueda de exclusividad de los clientes. Hoy la lista disponible en la Argentina tiene 15 versiones de Mercedes tradicionales y 14 de AMG, lo que muestra a las claras la relevancia que está tomado la división.

Pero qué diferencia a un AMG de un Mercedes tradicional. La división rescata siete puntos, a los que denomina los 7 magníficos: motor, caja, tren de rodaje, tracción, frenos, escape y selector de modos.

Todos estos puntos se ven modificados para hacer de un AMG un modelo con características propias, incluso en el diseño, que muestra variantes con respecto a las versiones clásicas.

Los actuales motores de la gama en la Argentina son los 35 (2.0 4 cilindros de 306 CV), 45 (2.0 4 cilindros de 421 CV), 43 (3.0 V6 de 390 CV), 53 (3.0 6 cilindros de 435 CV) y 63 (4.0 V8 de 510 CV). El GT (4.0 V8 de 730 CV) se reserva a otros mercados.

Estos cuentan, según la versión, con hibridización y también con la tecnología nanoslide, que aplica materiales de última generación como el hierro de carbono en camisas o cilindros. Algunos de estos propulsores están fabricados con el principio de “un hombre, un motor”, con el que cada unidad va firmada por quien se encargó de ensamblar todas sus partes en la fábrica de Affalterbach.

La gama tiene cajas de doble embrague de 7 u 8 marchas y también de nueve cambios, asociados a la tracción trasera o integral, mientras que los trenes cuentan con suspensiones mecánicas, neumáticas o hidráulicas.

También hay variantes en la tracción, que puede ser según el modelo integral fija o variable (con predilección enviar la fuerza al tren anterior o posterior) o simplemente trasera. Los frenos pueden ser de acero, aluminio o cerámicos.

Los puntos restantes son el escape, con su particular sonido gracias a silenciadores de titanio, tuberías de acero inoxidable y protección ignífuga de fibra de carbono y el selector de manejo, que contempla los modos Confort, Sport, Sport Plus, Race e Indivivual para que cada cliente exprima su AMG a gusto.