El Mustang es todo un clásico en la industria, uno de esos íconos que apenas se toca. Al menos así lo entendió Ford cuando presentó la quinta generación en 2005.

La sexta y actual continuó ese estilo y así parece que seguirá siendo en la séptima, que por primera vez fue vista circulando en pruebas, con el debido camuflaje.

Pese a que las protecciones dejan ver poco del diseño, queda claro que el nuevo Mustang, denominado internamente S560, será una evolución del actual, manteniendo el formato de coupé 2+2 con un largo capot.

La modernidad podría llegar al modelo que desde hace relativamente poco es global por el lado de las mecánicas, debido a las cada vez más duras regulaciones anticontaminantes.

Si bien se descarta que el nuevo Mustang seguirá teniendo a los motores de combustión como su principal oferta, no se descarta que de movida ofrezca alternativas con algún tipo de hibridización.

Los más osados piensan incluso en una versión completamente eléctrica, algo que no suena descabellado pensando que Ford le puso Mustang a su primer modelo con esas características (el SUV Mustang Mach-E, ver más).

El nuevo modelo debería debutar en marzo de 2023 en Estados Unidos y otros mercados, aunque tranquilamente podríamos a fin de este mismo año su diseño y características definitivas.