Informe: Alejandro Cisilino

Honda presentó en la Argentina la nueva GLH 150 (ver más), un modelo que se ensambla en Campana (junto a las Wave, XR150 Tornado, CG150, CBF125 y XR250) y que sale a conquistar al público que hace de la moto su herramienta de trabajo, pero también al cliente particular.

La apuesta es fuerte. En Honda esperan duplicar las ventas de la Titan, la otra 150 de la marca y quedarse con el segmento, llegando a unas 10.000 unidades previstas para este año.

En el breve contacto que tuvimos en la planta de Campana tras la presentación, la GLH demostró una muy buena ciclística a baja y alta velocidad (100 km/h), con una práctica posición de manejo, gracias en parte a un asiento muy cómodo. El tablero es analógico, con indicador de marcha y neutral.

Su perfil trabajador se denota en el cómodo y amplio porta equipaje posterior, ideal para llevar las cajas de las empresas de delivery.

La inyección es la novedad en esta cilindrada, ya que además de un menor consumo, evita vibraciones a alta velocidad y reduce el riesgo de apagarse al ralenti o al circular en segunda marcha. Acompaña una caja precisas y de recorridos cortos.

Los materiales son de primera calidad y es algo que se valora sabiendo que va a tener un uso intensivo. Además, la garantía de fábrica es de tres años.

La mecánica es similar a la de la Titan, lo que garantiza un bajo costo de reparaciones y services y lo mismo vale para la disponibilidad de repuestos, algo imprescindible a la hora de trabajar con la moto.

El precio de la GLH150 es de 199.999 pesos, el cual está bien por debajo de la Yamaha SZ RR 150, su principal competidor, que cuesta 250.000 pesos.

Otras rivales son la propia Honda CG 150 Titan, que a 275.000 pesos ofrece tablero digital pero mecánica a carburador y las producidas por el grupo Iraola Bajaj Boxer 150 y Gilera VC 150, que también a carburador no sobrepasan los 160.000 pesos, aunque ofrecen una menor calidad de materiales.