Honda está viviendo momentos de cambio en Sudamérica. El año pasado cerró la producción de automóviles en la Argentina (ver más) y la fabricación en Brasil está sufriendo cambios.

Si bien la nueva generación del City ya está confirmada (un modelo que seguirá sin llegar al país, ver más) y la del HR-V continúa, aun no se sabe qué sucederá con el nuevo Fit (ver más) y con el Civic (ver más).

Con respecto a  este último, los portales brasileños Autoo y Autos Segredos, aseguran que el clásico sedán que se produce ininterrumpidamente desde 1997 (cuando debutó la fábrica de Sumaré) no tendrá cabida más allá de 2022, cuando debería debutar la onceava generación.

De confirmarse la noticia, el nuevo Civic llegaría a Brasil importado de México, algo que debería ser igual si es que la filial argentina decidiera introducirlo a nuestro mercado.

Las dudas vienen debido a la política de la filial local de virar su oferta hacia el lado de los SUV. Si bien el actual Civic brasileño sigue en la gama de la marca, la oferta es de apenas una versión (la EXL). El otro sedán es el Accord, que llega de Estados Unidos en también una versión, pero podría tener novedades en el corto plazo.

El Civic se sumaría así a la lista de sedanes que en los últimos tiempos vienen dejando las plantas de producción sudamericanas sin reemplazo directo, como los Ford Focus o Renault Fluence.