El informe lo confeccionó Ernesto Cavicchioli, el Vicepresidente de Hyundai Argentina. Así fue cambiando este gravamen desde 2008.
Ernesto Cavicchioli, el Vicepresidente de Hyundai, es siempre una de las voces más críticas de la industria automotriz. Al frente de una de las importadoras más grandes del mercado, ya se anticipó en diciembre del año pasado el desacalabro que se venía con el regreso de la primera escala del impuesto interno (ver más).
A continuación, el texto escrito por el directivo de la automotriz coreana.
“Este impuesto ya afecta a las versiones mas equipadas del segmento SUV B Mercosur y a los sedanes segmento C Mercosur/México. Este sería el criterio “lujo” según la consideración de las autoridades del actual gobierno”.
“Es probablemente por este motivo que Honda HR-V la paga en su version EXL y VW discontinuó la version Hero de su T-Cross. Lo mismo podría pasar con Chevrolet Tracker Premier, Toyoya Corolla SEG y otros”.
“El mercado pierde versiones o las mismas son desequipadas para evitar pagar el impuesto. Desde el punto de vista del consumidor no tiene sentido pagar un 25% del valor del modelo solo por algún equipamiento extra, ni hablar de un 53,8% de la segunda escala”.
“Tengamos en cuenta que cuando la ex presidenta Kirchner reinstaló el impuesto en 2008 impactaba vehículos de USD 61.000 con un 11% de tasa efectiva. Es una cuestión de criterios definir que es o no lujo o alta gama pero esta claro que un auto de USD 61.000 es completamente distinto a uno de USD 25.000. Ademas se pagaba un “encarecimiento” del 11% contra un 25% actual. A su vez, la tasa de estadística que forma parte del calculo era de 0,5% y hoy es del 3% (600% de aumento)”.
“Esta nueva base afectará a vehículos importados con precio publico de USD 25.800 con un 25% de tasa efectiva que, de seguir el ritmo actual de devaluación diaria, terminará impactando en noviembre a autos de USD 23.500 antes de la nueva actualizacion a partir de diciembre 2020 (considerando una devaluación del 3% mensual como la que lleva a cabo el BCRA). La segunda escala, por otro lado impacta con un 53,85% a vehículos de más de USD 59.700″.
“Datos de inflacion y tipo de cambio: IPC acumulado a julio 2020: 15,8%. IPIM automóviles a julio 2020: 15,6%. Devaluación enero/julio 2020: 21% (enero/agosto: 23,8%)”.
“La actualización de la base del interno va usando valores de IPIM desde enero pero actualiza la base con dos meses de demora. Es decir que hasta ahora hubo solo dos ajustes, el primero de 4,9% (junio) y el actual de 6,4% (septiembre). Así, la base se actualizó un 12% cuando la devaluación hasta agosto fue del 24%”.
Conclusión: se actualizó solo el 50% de la devaluación y es por este motivo que cada vez afecta a mas modelos y versiones. Los efectos son los mismo de siempre: distorsiones en el mercado, falta de variedad de modelos y pédida de equipamiento de seguridad y confort”.
“Los consumidores ademas pagan impuesto sobre impuestos, ya que inscripción inicial y patente se calcula no sobre el precio FOB sino sobre el precio al publico que incluye el interno. Lo mismo para los seguros y para el calculo de bienes personales”.
“La base de la primera escala es hoy menor aún a la que había en el peor momento de impuestos internos (2014 / 2015). Recordemos que este impuesto fue suspendido entre 2001 y 2007 debido a la crisis económica y caída de ventas. Ambas condiciones se dan hoy en día, pero el impuesto se mantiene”.
Así fue variando el impuesto (en dólares) en la primera escala (azul) y en la segunda (rojo) con el correr de los años.
La primera pasó de casi 62.000 dólares cuando fue implementado en 2008 a los casi 26.000 de hoy (en 2018 y 2019 fue suspendido).
La segunda pasó de unos 47.000 dólares cuando se implementó en 2014 casi 60.000 de hoy.
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