La mayoría de las automotrices del mundo comenzaron produciendo, justamente, automóviles. Ford, Chevrolet, Renault, Citroën, Fiat, Volkswagen y muchas más son ejemplos de ello.

Pero no todas arrancaron haciendo autos. Algunas, incluso, arrancaron su vida comercial antes que el automóvil fuera patentado por Karl Benz, en 1886. Acá, te traemos 11 ejemplos de empresas que comenzaron vendiendo otros productos, algunos sin ninguna relación con los medios de transporte.

Uno de los más conocidos es el de Peugeot, una empresa familiar que comenzó a operar en Francia en 1810, haciendo los hoy clásicos molinillos de café. A finales del siglo XIX, Armand Peugeot se interesó, primero en las bicicletas, y luego en los autos, creando su primer modelo en 1889. La división automotriz se fundó en 1896.

La historia de la checa Skoda también comenzó antes que los autos. Fue fundada en 1859, cuando producía armas. En 1890, la empresa Laurin & Klement empezó a producir bicicletas y en 1905 ya fabricaba autos. Recién en 1924, Skoda adquirió a este fabricante de la zona de Bohemia y comenzó su etapa automotriz.

El fabricante indio Tata se inció en 1868 como una empresa comercial que rápidamente extendió sus dominios a la industria del algodón, el acero y los hoteles, un conglomerado que en 1895 tenía nada menos que 95 empresas. En 1954 se asoció con Daimler para producir vehículos comerciales, pero el primero de pasajeros llegó recién en 1991.

Mitsubishi arrancó en Japón en 1870 como una empresa de transporte que también se extendió a muchos rubros, como la minería, navíos, banca, seguros o aviones. En 1917 creó con la base de un Fiat su primer modelo, pero no tuvo gran éxito. También lo intentó antes de la Segunda Guerra, hasta que en 1960 creó su primer modelo propio.

Otra japonesa, Suzuki, fue fundada en 1890 para producir telares. En 1929 ya estaba fabricando modernas máquinas textiles, con los que consiguió dividendos para meterse en la industria automotriz. En 1937 creó los primeros prototipos, pero tras la guerra, en 1952, se puso a producir motos. Tres años después arrancó con los autos.

La nipona Toyo Cork fue creada en 1920 y lo primero que produjo fueron corchos. Luego comenzó a fabricar material bélico y en 1931 ya producía pequeños utilitarios basados en motos bajo la marca Mazda. Recién en 1950, tras la Segunda Guerra, realizó vehículos comerciales y en 1960 sacó al mercado su primer automóvil.

En 1922, la Swallow Sidecar inició su vida comercial fabricando estos complementos para motocicletas. Recién en 1935 sacó al mercado automóviles denominados Jaguar. En 1945, la connotación SS de las iniciales de la empresa no eran bien vistas y el nombre actual pasó a ser el de la firma británica para todos sus productos.

La japonesa Toyota arrancó en 1924 produciendo máquinas de coser, pero recién dos años después, Sakichi Toyoda fundó la empresa. En 1933 se creó la división automotriz, que para 1937 sacó su primer producto al mercado. Hoy es un gigante que participa en un sinfín de industrias, incluso la de construcción de viviendas.

La coreana Hyundai nació en 1947, como una constructora que rápidamente expandió su imperio a infinidad de rubros. En 1968 comenzó produciendo modelos de Ford, pero recién en 1975 creó su primer modelo propio, el Pony, con el diseño de Giorgetto Giugiaro.

En 1948 nació la empresa fundada por Ferruccio Lamborghini. Arrancó haciendo tractores, una división que aun hoy se mantiene, pero también se metió en petróleo y hasta aires acondicionados. La historia cuenta que este entusiasta de Ferrari se peleó con Don Enzo y eso lo inspiró a producir sus propios automóviles, tarea que comenzó en 1963.

Nuestro último ejemplo es el de Honda, que arrancó una vez terminada la Segunda Guerra, cuando Soichiro Honda comenzó a colocar motores en bicicletas. La empresa fue fundada en 1949 y recién 14 años después produjo su primer automóvil. Hoy, la japonesa hace motores para productos marinos, motos y hasta aviones.