A mediados del año pasado, Honda Argentina confirmó que dejaría de fabricar automóviles en su planta de Campana (ver más) para centrarse en la producción de motos.

Con el levantamiento de la “cuarentena” productiva, la marca finalizó las últimas unidades de la HR-V y a mediados de mes finalizó la producción tras nueve años exactos.

Las operaciones en Campana se iniciaron con la producción del City en mayo de 2011, la cual duró hasta 2014. En esos cuatro ejercicios, la planta produjo 27.346 unidades del sedán (ver prueba).

En 2015 comenzó a producir la HR-V (ver prueba), la cual finalizó este mes, tras 52.397 unidades. En total, la planta de Campana alcanzó las 79.743 unidades, siendo 2016 el mejor año, con 12.033 unidades.

En decisión de levantar la producción de autos tuvo que ver con cuestiones globales de la marca, lejos de la crisis de ventas del mercado argentino, donde Honda seguirá estando presente (ver más).

Ahora, la planta de Campana seguirá con la producción de motos, mercado donde Honda es la marca más vendida. Son seis los productos que se fabrican allí: Wave, Wave Cast Disc, Tornado, CB125F, CG150 y XR250.

La última marca que había dejado de producir en la Argentina era Suzuki, en 2008, y antes Seat, en 2002. Pero ambas lo hacían en plantas que siguieron fabricando automóviles (GM Alvear y VW Pacheco, respectivamente).

La última planta que cerró sus puertas a la producción de automóviles fue la de Jeep, en Córdoba, en tiempos de la fusión de Damiler y Chrysler. Allí, entre 1997 y 2001, se produjeron unidades de los Cherokee y Grand Cherokee.