Entre la necesidad de bajar costos y la irrupción de nuevos modelos eléctricos, todo parece indicar que no habrá una nueva generación para los Renault Scénic y Espace. La decisión también se cargaría al Talisman.

Renault es de las pocas marcas que aun mantiene monovolúmenes en sus filas (otra es Citroën). El concepto en Europa justamente lo impuso la marca del rombo con el Espace, en 1984. Luego fue el turno del Twingo en 1992 y del Scénic, en 1996, como parte de la gama Mégane.

La última generación de todos esos modelos dejó bastante atrás el formato monovolumen, con los Scénic y Espace mutando al estilo SUV que tanto se impone. Sin embargo, tanto la competencia externa como interna (Renault ofrece en ese nicho el Kadjar), vienen debilitando año a año las ventas.

En 2019, el Scénic retrocedió un 16 por ciento sus patentamientos en Europa, con más de 77.000 unidades, mientras que el Talisman y el Espace cayeron el 20 por ciento. El primero llegó a casi 16.000 ventas y el segundo no pasó de las 10.000.

Los tres modelos, que se fabrican en Francia, no supondrían el cierre de la planta de Douai, que tiene pensada la producción de dos modelos eléctricos tanto para Renault como para Nissan.