Hace un par de días, se filtraron las primeras imágenes de la nueva generación del Fiat 500, pero ahora la marca liberó toda la información del nuevo modelo, que por ahora no está previsto que llegue a nuestro mercado.

Una de las razones, sino la principal, es que ahora el 500 será, como sucede con la mayoría de los automóviles pequeños de Europa, únicamente eléctrico.

Estéticamente, la nueva generación es muy similar a la anterior (que a su vez evoca a la de 1957), pero está desarrollado sobre una nueva plataforma y, además, propone algunas novedades en el diseño. Es 6 cm más larga, 3 más ancha, uno más baja y mayor entre ejes.

El motor eléctrico entrega 118 CV. Las baterías se recargan el 80 por ciento en 35 minutos en una toma a máxima capacidad, pero hasta 14 horas en un toma convencional. La autonomía es de 320 km. Hay un modo que desactiva la climatización y limita la velocidad para aumentar el rango y otra que activa el manejo con un solo pedal.

Las más importantes son los nuevos faros, siempre circulares, con la zona superior separada y ubicada dentro del capot, la desaparición del logo de Fiat en la trompa (lleva el del modelo) y las luces traseras tradicionales, sin el centro color carrocería, algo que adoptaron los antiniebla delanteros.

Como es habitual, habrá una versión cerrada y otra cabrio (con techo de lona), ambas con capacidad para cuatro pasajeros. Sí es nuevo el diseño interior, que respeta el instrumental circular, pero adopta una plancha totalmente nueva, con una pantalla táctil con mayor protagonismo.

No hay selectora del modo tradicional y la caja se activa por medio de botones. El equipamiento ofrece frenada de emergencia, mantenimiento de carril y control crucero adaptativo.

A diferencia de la generación actual, que se produce en Polonia y fue fabricada en México, esta se realizará en la planta italiana de Torino.