Si bien hay muchas start up como Rivian (ver más) creando nuevos automóviles y ya hay poco lugar para las sorpresas, todo el mundo quedó boquiabierto en la muestra tecnológica del CES cuando Sony presentó el Vision S.

Pero tranquilos, al parecer, la marca japonesa que interviene en múltiples áreas de la tecnología, pero nunca desembarco en la industria automotriz salvo como proveedor, no tiene planes de producir a este atractivo fastback de cinco puertas.

Sony aclaró que el Vision S es solo una excusa para mostrar todo su arsenal tecnológico, tanto para el entretenimiento como para los asistentes de conducción. De hecho, la marca podría posicionarse en el futuro como un gran proveedor de estas tecnologías para las grandes automotrices.

El Vision S, que está apoyado en una plataforma producida por el gigante Magna, uno de los más grandes proveedores de la industria, es eléctrico, pero nada se divulgó acerca de su posible motorización. Tampoco se conocen a los responsables del diseño, aunque está firmado por la propia Sony.

El modelo cuenta con 33 sensores que asisten a la conducción (no se habla de manejo autónomo sino asistido) y en el interior ofrece una pantalla panorámica que permite visualizar los espejos laterales, el instrumental y todo el sistema de infotenimiento. También hay pantallas para los pasajeros de atrás en los apoyacabezas delanteros y un sistema de sonido de 360 grados.

Snoy ya demostró todo o que puede aportar a los futuros automóviles de la industria. Pero así como un día lo soñó Apple, ¿tendrá en sus planes meterse de lleno en la industria del automóvil?