BMW renueva parte de su línea de SUV con las llegada de las nuevas generaciones de las X4 y X5. Se trata de la segunda generación de la X4 (la primera se estrenó en 2013) y la cuarta de la X5 (las anteriores son de 2000, 2007 y 2013).

La X4 llega en dos versiones: xDrive 30i xLine y xDrive M40i. La primera viene con un motor 2.0 de 252 CV y la segunda con un seis cilindros 3.0 de 354 CV. La X5 lo hace en una única versión xLine con el seis en línea 3.0, pero con 340 CV. Todas se unen a una caja automática de ocho marchas, levas al volante y tracción integral.

La nueva generación del X4 es continuista en su diseño deportivo , pero crece 8 cm de largo, 4 de ancho y 5 entre ejes. El baúl tiene una capacidad de 525 litros. La X5, por su parte, creció 3 cm de largo, 7 de ancho 2 de alto y 4 entre ejes.

Algunos de los equipamientos que traen estas versiones son techo panorámico, climatizador de tres (X4) y cuatro  zonas (X5), butaca eléctrica, tapizado de cuero, asistente de estacionamiento, tablero digital, control por gestos, portón de apertura sin manos, head-up display y faros led (X4) y láser (X5), además de los clásicos de seguridad como airbags hasta de cortina y control de estabilidad. La X5 estrena un paquete off road con suspensión regulable y seteos para distintos terrenos.

El precio de estas versiones es de 94.900 dólares para la X4 xLine, de 133.900 para la X4 M40i y de 135.900 para la X5 xLine. La garantía es de tres años o 200.000 km.

Como rivales, la X4 tiene como competidor directo al Mercedes GLC Coupé, en tanto el X5 se las ve contra los Audi Q7, Jeep Grand Cherokee, Range Rover Velar, Mercedes GLE, y Volvo XC90, entre otros.