Aunque Honda asegura que este modelo sigue siendo un prototipo, el futuro eléctrico de la marca ya tiene todo listo para su comercialización, que se dará a principios de 2020 en los mercados del primer mundo.

El diseño retro del E es uno de los puntos fuertes del modelo. A los guiños a los pequeños Honda de comienzos de los 80, se suman innovaciones como los espejos con cámaras (laterales e interior) y manijas de puertas delanteras que se despliegan ante la presencia del conductor. Las manijas de las puertas traseras van elevadas como en la HR-V, por ejemplo.

El interior también conjuga pasado y presente, con detalles en símil madera y un instrumental/consola enteramente digital a lo ancho de la plancha de a bordo.

El motor será puramente eléctrico, con 150 CV y tracción a las ruedas posteriores. Se podrá recargar hasta un 80 por ciento en solo 30 minutos y la autonomía será superior a los 200 km.

Algunas particularidades son un reparto equitativo del peso en ambos ejes (con suspensiones independientes) y un radio de giro muy reducido.