La versión deportiva del sedán mexicano se presenta con un motor 2.0 de 230 CV, caja DSG de seis marchas y suspensión trasera independiente.
Volkswagen completa la gama del Vento que importa de México (ver lanzamiento) con la versión deportiva GLi, una denominación que ya se utilizó en la generación anterior.
Se distingue de las versiones Comfortline y Highline por llevar el motor 2.0 turbo de 230 CV (las otras ofrecen un 1.4 turbo de 150 CV), unido a una caja DSG de seis velocidades.
A nivel dinámico, la novedad es que esta versión lleva suspensión trasera independiente, algo que había quedado de lado en la séptima generación del Vento.
Si bien la estética del GLi es sobria, se destaca por ofrecer nueva llantas de 18” y doble salida de escape. Por dentro, aparece un volante forrado en cuero, selectora de marchas y pedalera en aluminio, tapizado de cuero perforado con costuras en rojo, decoración GLi.
El equipamiento mantiene los elementos del Highline, pero le suma asistente de iluminación para las luces largas. Esto se agrega al ESP, seis airbags, instrumental digital, pantalla táctil de 8″ con cámara, control crucero, acceso y arranque sin llave y butaca eléctrica.
El GLi se ofrece en cuatro colores: negro, blanco, rojo y gris. Los precios de toda la gama son de 1.187.000 pesos para el Comfortline, de 1.477.600 para el Highline y de 1.777.600 para el GLi.
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