A cuatro años de su lanzamiento, Mini presenta el restyling de su modelo más afamado, tanto en la carrocería de 3 como de 5 puertas así como la variante sin techo. Hay pequeños cambios estéticos, mejoras en las motorizaciones y una gama con ocho versiones entre las tres carrocerías.

Los cambios se ven en las luces delanteras, con nuevos lentes y el anillo de led, y en las traseras, que estrenan el diseño Union-Jack que simula la bandera británica.

Si bien las motorizaciones no han cambiado en cilindrada y potencia, todos incluyen mejoras en su peso al sustituir diferentes piezas de aleación por aluminio, lo que redundó en una mejora en el torque y una reducción de emisiones de CO2 de hasta un 5%.

Las versiones disponibles arrancan con la Cooper Pepper, equipada con el motor 1.5 turbo de 3 cilindros y 136 CV, unido a una caja AT doble embrague de siete marchas. El equipamiento incluye llantas de 16″, climatizador, sensor de lluvia y control crucero adaptativo.

El Cooper Chili incorpora el motor 2.0 turbo de 192 CV, con la misma caja pero con relaciones más cortas y levas al volante. El equipamiento agrega llantas de 17″, sensor de estacionamiento y faros full led.

La Cooper S look JCW mantiene la motorización, sumando el kit estético JCW y techo panorámico, mientras que la John Cooper Works ofrece una potencia de 231 CV y caja AT de doble embrague y ocho marchas, además de llantas de 18″ y capot decorado.

Con una garantía mejorada de 3 años o 200.000 km, la gama tiene estos precios: Pepper 3 puertas a 34.900 dólares, Pepper 5 puertas a 36.400, Chili 3 puertas a 46.900, Chili 5 puertas a 48.900, Look JCW 3 puertas a 51.900, Look JCW 5 puertas a 53.900, Chili Cabrio a 61.900 y JCW 3 puertas a 63.700 dólares.