A seis años de la aparición del Evoque, Land Rover acaba de presentar la segunda generación del modelo, vendido por la división Range Rover.

Con casi las mismas medidas (4,37 metros de largo, 1,90 de ancho y 1,65 de alto) y un diseño muy similar al original, el nuevo Evoque está apoyado en la nueva plataforma Premium Transverse, con la que gana dos cm entre ejes y mejora la rigidez un 13 por ciento. Las llantas pueden ser de hasta 21 pulgadas.

Donde hay más modificaciones estéticas es en el interior. Hay tres pantallas, una tras el conductor para el instrumental, y dos táctiles, para manejar la multimedia y la climatización, entre otros elementos. Otra novedad es que la selectora es del estilo tradicional y deja el comando giratorio.

Esta disposición es similar a la del Range Rover Velar, del que el Evoque también toma las manijas de puerta que se ocultan en la carrocería y se despliegan al detectar la proximidad de la llave.

Si bien la marca no ha aclarado si llegarán más versiones, por ahora solo hay disponible una de cinco puertas, cuando antes había una de tres y una descapotable. El baúl tiene una capacidad de 591 litros.

La gama de motores utiliza siempre un 2.0 litros. Los nafteros ofrecen 200, 250 y 300 CV y los diesel 150, 180 y 240 caballos. Hay cajas manuales de seis marchas o automáticas de ocho. La tracción es siempre integral, pero hay dos tipos: una de reparto automático y otra que permite rodar en tracción simple o doble a pedido del conductor.

Hay novedades tecnológicas como el “capot transparente“, un sistema que muestra mediante cámaras el estado del piso debajo del motor, y el uso de la inteligencia artificial para reconocer hábitos del conductor y programara elementos como los asientos, temperatura y más.

Aun no está confirmada su llegada a la Argentina pero estimamos que el nuevo Evoque podría arribar al país a fines de 2019.